La multitudinaria Mallorca 312 atrapó a miles de conductores en atascos kilométricos y que en algunos casos superaron la hora y media de espera. Los puntos más conflictivos estuvieron en la Serra de Tramuntana, donde Sóller sufrió un colapso circulatorio dentro y fuera de su casco urbano, y en las localidades de Deià, Estellencs y EstellencsBanyalbufar, incomunicadas y cerradas varias horas al tráfico.

La marcha cicloturista raunió a ocho mil ciclistas -récord de participación- y ha puesto a prueba la paciencia de los conductores que se han lanzado a la carretera en una jornada de cierre de carreteras y restricciones de tráfico. Cien voluntarios de Protección Civil, 130 agentes de la Guardia Civil y miembros de la organización de la prueba han trabajado toda la jornbada para tratar de minimizar en lo posible el perjuicio para los conductores.

La jornada se desarrolló sin incidentes de gravedad pese a la coexistencia de miles de ciclistas y vehículos en la carretera. Únicamente el 061 se ha visto obligado a practicar numerosas asistencias a ciclistas por caídas leves que les han provocado heridas de poca consideración.

Fuentes de la Guardia Civil de Tráfico expresaron su "satisfacción", argumentando que ha habido menos problemas circulatorios que otros años. Los atascos, han informado, no han superado la hora en la mayoría de los casos.

La competencia por el espacio público se ha vivido con especial intensidad en Sóller y alrededores, municipio que antes del mediodía registraba atascos kilométricos. También el acceso al municipio desde Palma ha sido conflictivo, especialmente a la altura de Palmanyola.

Fue una mañana difícil para residentes y turistas, algunos de los cuales han perdido su vuelo de vuelta a su país. También ha habido afectación al transporte público y a las ambulancias hasta pasado el mediodía, cuando se han ido reabriendo gradualmente las carreteras a medida que el pelotón ciclista avanzaba.

Comercios de Sóller porque la prueba les ha obligado a cerrar todos los accesos a los cascos urbanos, impidiendo la llegada de turistas. La organización esperaba este año reducir de cinco horas a dos y cuarto el tiempo máximo de incomunicación de estas localidades conectadas por una sola vía.

Los ocho mil ciclistas, que podían elegir entre tres recorridos distintos según su nivel de preparación, salieron todos juntos desde Platja de Muro a 07:00 horas y han pedaleado durante toda la jornada por la Serra de Tramuntana, diversos municipios de Es Raiguer y el área de Artà para terminar de nuevo en Platja de Muro. La marcha, y también los cortes de tráfico, se alargarán hasta las 21:00 horas.

Circular por la zona de Artà fue muy complicado desde primera hora de la tarde. Quienes han querido acceder a la Colònia de Sant Pere para visitar la Fira del peix tuvieron que dar un gran rodeo porque los accesos principales estuvieron cerrados.