Mallorca se encuentra a la cola de España en estaciones de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) por número de vehículos de toda España. Mientras que comunidades como Castilla la Mancha tienen más de tres puntos de inspección por cada 100.000 habitantes, las cuatro estaciones de la isla representan apenas media estación por cada 100.000. O dicho de otra manera: con 800.000 vehículos que hay en la isla, cada punto de ITV tiene que hacer frente a 200.000 coches. Por ello, la Sindicatura de Cuentas recomienda al Consell, para ponerse en la media del país, habilitar dos nuevas estaciones de ITV en Mallorca.

El último informe de la Sindicatura revisa la gestión del servicio de ITV en las islas y una de las recomendaciones que acaba haciendo en sus conclusiones es "incrementar la red de estaciones de ITV con dos estaciones en Mallorca". Cabe recordar que en la actualidad hay en la isla cuatro puntos para la inspección técnica: Son Rossinyol y Son Oms, en Palma, una en Inca y otra en Manacor. Con el incremento propuesto por Sindicatura para dar "un mejor servicio atendiendo la proximidad de los usuarios", la isla contaría con seis estaciones, con las que con un ratio de 0,75 por cada 100.000 vehículos seguiría por debajo de la media española.

De hecho, para sugerir este aumento, la Sindicatura argumentó que en la actualidad "el nombre de estaciones por cada 100.000 vehículos en Balears es sensiblemente inferior a la media nacional, estando Mallorca por debajo de cualquier otra comunidad". Mallorca cuenta con un ratio de 0,5 puntos de inspección por cada 100.000 vehículos frente a las 1,35 estaciones de media nacional.

Precios al alza

La falta de estaciones de ITV sumado a un envejecimiento del parque automovilístico -en dos años aumentan un 16 por ciento los coches en la isla de más de 10 años- han supuesto que la inspección haya aumentado un 8,09 por ciento, más que el incremento de vehículos en el mismo periodo (5%), constata en su informe la Sindicatura de Cuentas.

Más allá del número de puntos de servicio, la Sindicatura recomienda reducir el impacto al alza de los precios de las tasas de la ITV desligándolo de la actualización del IPC. Una de las cosas que contempla es la gestión directa por parte del Consell para tener "más control sobre las tarifas" y "reducir la presión inflacionista que supone su actualización de forma automática en función del IPC o tras fórmulas de revisión".

En la misma línea, señala que con la actual estructura, la administración "no verifica de forma suficiente que el concesionario cumpla los requisitos exigidos en sus pliegos y de acuerdo con la normativa que resulta aplicable".

Cabe recordar que la consellera insular de Territorio y Carreteras, Mercedes Garrido, anunció el año pasado la internalización del servicio de ITV y de la rebaja de las tarifas para este año. Sin embargo, tuvo que acabar dando marcha atrás. Informes técnicos y jurídicos obligaron a la institución insular a desestimar esta fórmula, ya que la llamada Ley Montero impide poder subrogar los 114 trabajadores de la actual concesionaria. Asimismo, la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2017 aprobó un apartado donde se impedía la internalización de determinados servicios.