—Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Cuándo se afiliará a Ciudadanos?"

—No he tenido contactos con Ciudadanos. He tomado mi decisión sin condicionantes externos. No sé cuál será mi futuro, pero nunca he renunciado a la política.

—La felicitación de Pericay parecía una advertencia.

—Me tomé un café con él hace años, al igual que con la mayoría de líderes políticos de Balears. No me veo de candidato, pese a las informaciones que lo señalan.

—¿Ya conoce a Albert Rivera?

—No, no nos conocemos.

—Ciudadanos puede gobernar según los sondeos.

—Me cuesta aceptar que ningún partido dé un vuelco tan importante, me creo poco los sondeos.

—Quede claro al menos que no ficha por Podemos.

—No creo que me quieran. Siento mucho respeto por los votantes de Podemos, y mucho menos por sus dirigentes. Sobre las pensiones, ni la demagogia populista de Iglesias ni la postura de Rajoy.

—¿Bono le ha enviado para iniciar el éxodo?

—Fue la primera persona a la que comuniqué mi abandono. Me manifestó su respeto por mi decisión, y en la relación personal nada ha cambiado.

—¿Cuál fue la segunda persona a la que avisó?

—Francina Armengol, me pareció lo más correcto. Respondió a mi correo con un WhatsApp en que me transmitía su tristeza y me pedía que me lo repensara.

—Y eso que el PSOE le premió con un cargo en Calvià.

—Soy funcionario en Calvià, y el alcalde me preguntó donde me gustaría estar. Al hacerme director de Turismo, me dijo que "te propongo por tu experiencia, y no por ser del PSOE".

—Por lo visto, teníamos razón quienes escribíamos que usted era el conseller del PP en el Pacto de Antich.

—Cuando afirman esto, usted entre otros, me gustaría saber en qué se basan. Monté el Observatorio de Igualdad de la Guardia Civil, creé la ecotasa.

—Tal vez sea por su moderación.

—Siempre me he identificado como socialdemócrata. A partir de ahí, son muy libres de colgarme etiquetas.

—Y la ecotasa fue una creación de Celestí Alomar.

—La ecotasa se hizo técnicamente desde mi conselleria. Antich me encargó un tributo aplicable y constitucional. El ministro Jesús Posadas me dijo que no se atrevieron a recurrirlo. La actual ecotasa es la mía, al 99 por ciento.

—Precisamente por su derechismo, hubiera sido usted un candidato ideal para el PSOE balear.

—La gran bolsa de votos está en el centro. Lo hemos visto en las elecciones francesas, con el socialista Hamon relegado a la sexta posición en la primera vuelta.

—Habla usted con respeto de Macron, ¿lo copiará?

—No me veo, no seré el Macron mallorquín. Mucha gente me dice que puedo ser un buen candidato, pero conozco mis limitaciones. No voy a crear un partido.

—Sus cargos con Zapatero tenían a ERC de socio.

—La Esquerra de 2004 no era la de hoy. No planteaba un desafío al Estado ni una declaración unilateral de independencia, aunque estuviera entre sus aspiraciones.

—¿La Guardia Civil le cambió la vida?

—No fue un shock, pero quizás tengo una mayor sensibilidad en los temas relacionados con la lucha antiterrorista. Es muy duro ver cómo la sinrazón de unos asesinos etarras pone fin a la vida de dos veinteañeros en Cap Breton, para no conseguir nada. Quizás el hecho de haber estado en la Guardia Civil hace que yo añada un comentario adicional al tema de Cataluña, y es que no hemos estado luchando cincuenta años contra ETA, con mil muertos, para que el Parlament de Cataluña declare lo mismo que quería conseguir ETA a través de las armas. Ahí nos preguntarían las víctimas del terrorismo "para qué murieron entonces nuestros hijos".

—Creíamos que el enemigo era Isis y no Cataluña.

—El enemigo son las personas que transgreden la ley. No hay que identificar a los independentistas con Cataluña, donde prácticamente la mitad no piensan así.

—Pero no se habla de Isis, tras una matanza así.

—Que no se hable no quiere decir que las fuerzas de seguridad y el CNI no trabajen. El terrorismo radical islamista es la gran amenaza a la seguridad nacional. No solo se investigan movimientos terroristas, también secesionistas. Yo leía informes de Galicia, de entidades que podían desembocar en un movimiento violento, y los servicios de inteligencia han de hacer sus investigaciones.

—No se quejará del PSOE en Cataluña, 155 a discreción.

—Alguna cosa no me pareció adecuada, plantear el indulto para imputados por sedición o rebelión. El 155 se aplicó mal, no tiene sentido para convocar elecciones a los dos meses. Es más, los resultados han sido idénticos.

—Usted fue casi ministro, Antich fue president entero.

—Nunca se me han subido los cargos a la cabeza, ni he visto la erótica del poder. Son mis amigos quienes me avisan de la importancia de los puestos que he ocupado.