Tras siete años con el edificio rehabilitado y oficialmente inaugurado, la apertura de Ca n'Oleo puede ser cuestión de un mes: la Universitat quiere que el casal esté abierto ya en las próximas vacaciones de Semana Santa. Ése es el deseo de la UIB, que está pendiente de acabar unas pequeñas obras de puesta a punto (necesarias al llevar el edificio tantos años cerrado y sin uso) y de firmar un convenio con la conselleria de Cultura.

Y es que el plan de la Universitat es ceder parte de este inmueble ubicado en el carrer de l'Almudaina (en pleno centro histórico de Palma) a esta conselleria para que pueda trasladar allí la dirección general de Cultura. La UIB se quedaría con parte de los espacios "para usos académicos y culturales" y para así organizar "actividades culturales de forma conjunta" con el Govern.

Así lo señaló ayer el rector de la institución académica, Llorenç Huguet, que subrayó el valor que tendrá para la Universitat poder contar con un edificio "emblemático" en el corazón de la ciudad, "junto a Cort, el Consell y la Seu" para impulsar actividades conjuntas con la dirección general de Cultura "y también propias".

El edificio de Ca n'Oleo es considerado una joya del gótico civil y fue donado a la Universitat en 1986. Las obras de rehabilitación no empezaron hasta 2006 y se prolongaron durante cinco años. Fue inaugurado finalmente en 2011 y lleva desde entonces cerrado. La factura total ha superado los cinco millones de euros.

Para abrirlo y darle un uso, parte del problema que se ha encontrado la UIB es su estructura, que dificulta darle un uso docente. Además hacía falta dinero para equiparlo.

La legislatura pasada se planteó que acogiese la Fundación Camilo José Cela, pero suponía un mínimo de 70.000 euros de coste de mantenimiento, además del sueldo de al menos un bedel, y en el contexto de recortes y contención del déficit del Govern del PP el proyecto quedó parado.

Respecto al posible traslado de estudios del campus al edificio del Estudi General Lul·lià en el centro de Palma, el rector remarcó que la propuesta parte del Ayuntamiento, que sería, según Huguet, quien asumiría los costes de la rehabilitación y adaptación del edifico. Insistió en que las negociaciones están en una fase muy inicial como para hablar de plazos y que en cualquier caso se empezaría por trasladar estudios de posgrado.

¿Está de acuerdo el patronato del Lul·lià? El rector indicó que la entidad estuvo presente en la reunión matenida en Cort hace unas semanas para tratar este tema y señaló que "no hay ninguna voluntad de prescindir" del patronato. No aclaró si el Lul·lià se había posicionado a favor o en contra: "Era una primera reunión, no llegamos a tanta precisión".

Huguet señaló que en dicha reunión también estuvieron representantes de la Fundació Francesc de Borja Moll y que la idea de la Universitat es poder "compartir espacios y hacer actividades universitarias".