La Dirección General de Deportes de la Generalitat Valenciana, en coordinación con el Govern de Balears, está estudiando la fórmula para frenar que el campeonato de Balears de tiro pichón y tiro a la codorniz se pueda celebrar en los campos de tiro de Cheste y Llíria el 23 y 24 de marzo, ya que en las islas la Ley de Bienestar Animal, también conocida como Ley de Toros a la Balear, aprobada el pasado mes de agosto, impide taxativamente esta actividad al considerarla un maltrato animal.
José Miguel Moyá, director general de Deportes de la Generalitat Valenciana, confirmó ayer a al diario Levante del mismo grupo editor que Diario de Mallorca, que "lo estamos mirando". Moyá reconoció que desde el Govern de Balears le pidieron ayuda para suspender el torneo de tiro pichón y codorniz lanzadas con tubo neumático para ser abatidas con escopetas de perdigones.
Tal y como adelantó ayer este diario, el director general de Deportes del Govern, Carles Gonyalons, aseguró que "estamos trabajando en ello, pero no puedo adelantar nada hasta que lo hayamos comunicado a la Federación Balear de Caza". El Ejecutivo autonómico, según ha podido saber este periódico, está estudiando toda una batería de medidas que impedirían la celebración del torneo, ni en Balears ni en Valencia, al quedar sin ningún tipo de validez deportiva y, por consiguiente, los ganadores no serían considerados como tales en la legislación deportiva de las islas. Según Gonyalons, en estos momentos el torneo sería válido si se celebra en Valencia, ya que los estatutos de la Federación Balear de Caza así lo contemplan.
Los animalistas se movilizan
Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) animalistas valencianas se están movilizando para impedir que el campeonato de Balears de tiro pichón se celebre en su comunidad autónoma, tal y como tiene previsto la Federación Balear de Caza para los días 23 y 24 de marzo. Exigen a la Generalitat Valenciana que paralice estas actividades e impida que "los escopeteros de Balears puedan celebrar un campeonato maltratando animales en otra comunidad ya que en las islas está prohibido".
En un duro comunicado, las entidades Mis Amigas las Palomas y El Rebrot de la Vida, recuerdan que en Balears hay 11 campos de tiro que no pueden organizar tiradas al pichón ni a la codorniz en base a la Ley de Bienestar Animal. "Sin embargo, estos escopeteros siguen emperrados en maltratar animales a cualquier precio, migrando a donde se lo permitan", aseguran.
Vergüenza
En su escrito dirigido a la conselleria de medio Ambiente de Valencia denuncian "la vergüenza que supone que la Comunidad Valenciana ofrezca refugio a todos los escopeteros de Levante. La lista mínima de campos de tiro es extensa y se amplía con cada investigación: Cheste, Llíria, Ribarroja, Picassent, Catarroja, Torrent, La Pobla de Valbona, Guadassuar, Cullera, Jávea, Denia, Cocentaina, Alquería de Aznar, Sax, Elda, Balones, Elche, Aspe, San Vicente del Raspeig, Orihuela, Catral, Montealegre del Castillo... todos ellos denunciados ante la Conselleria correspondiente y sus ayuntamientos que siguen resistiéndose al cambio".
De igual modo, recuerdan en el comunicado que, además de Balears, otras comunidades autónomas como Murcia, Galicia, Canarias, Cataluña, Castilla la Mancha y la Rioja tampoco permiten esta práctica en su territorio. "Tras años de manifestaciones, las asociaciones animalistas y ecologistas no vamos a consentir que se masacren, al margen de la ley, palomas y codornices durante todo el año en Valencia. Lucharemos por que este año 2018 se lance la nueva ley de protección animal valenciana que sustituya la obsoleta ley del siglo pasado".
Las dos entidades han reclamado en varias ocasiones al Consejo Superior de Deportes del Ministerio de Educación que detenga lo que consideran "una abominación".
