El líder del PP balear, Biel Company, insistió ayer en que si en las elecciones autonómicas del próximo año los populares recuperan el Govern derogarán "inmediatamente" cualquier decreto que imponga el catalán como requisito en la sanidad pública balear, a la vez que acusó a los partidos del Pacto de haber "politizado la lengua" y de querer "crear odio y confrontación en la sociedad". Company sostuvo que "el PP siempre ha sido claro en el tema de la lengua" y que a él "nadie" le puede "dar lecciones sobre querer lo que es nuestro", pero la defensa de la lengua debe hacerse sin "dividir y confrontar" a la sociedad.

El líder popular no aclaró si la eliminación del catalán como requisito se aplicaría, en el caso de que gobernara, sólo para la sanidad o para toda la administración autonómica, volviendo a considerar el conocimiento de la lengua como un mérito. "Hay puestos en los que es importante y necesario que el catalán sea un requisito y otros no", dijo al respecto.

Incidió en que, en lo que se refiere a la sanidad, el PP será "contundente" y "no permitirá que se merme la sanidad en las islas por el catalán" ya que el idioma "se puede defender donde sea" pero "con la sanidad pública no se puede jugar ni improvisar", como a su juicio ha hecho el Govern de Francina Armengol. "Defenderemos la lengua donde toque, pero cuando uno se pasa de frenada lo que consigue es crear rechazo y eso es lo que ha hecho el Pacto", concluyó.

El PP colocará hoy la lengua en el asunto estrella del primer pleno del Parlament del nuevo curso político con una pregunta de la portavoz popular, Marga Prohens, a Armengol sobre el decreto del catalán en la sanidad y una interpelación al conseller de Educación, Martí March, sobre adoctrinamiento en las aulas.

El portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay, también preguntará a la presidenta por el decreto para la sanidad. Olga Ballester, diputada de Cs, anunció ayer que su partido acudirá a la manifestación convocada para el próximo día 18 y emplazó a Armengol a "cortar por lo sano" y retirar el decreto. En este sentido defendió que "se ponga el catalán como mérito para acceder a la sanidad pública" y después se proporcione a los profesionales sanitarios "herramientas" para aprender la lengua.