La inversión en reformas hoteleras todavía no ha acabado. Después de haber invertido más de 1.500 millones de euros en los últimos años, los hoteleros volverán a abrir sus cajas para seguir adelante con nuevas reformas en sus establecimientos. Sólo durante este invierno y antes de que empiece la próxima temporada turística, la inversión en la mejora de hoteles habrá alcanzado los 300 millones de euros en Balears.

La cifra la dio ayer la presidenta del Govern, Francina Armengol, que a pesar de los ataques de los grandes hoteleros sigue aplaudiendo a los empresarios turísticos de las islas por haber firmado una subida de sueldos del 17 por ciento y por "seguir apostando por la calidad". La presidenta habló primero de 228 millones en reformas en la planta hotelera y luego subió la apuesta a 300 millones, que, explicó, "se están invirtiendo ahora mismo en nuestras islas".

El primer dato es indiscutible y la inversión no bajará de esa cifra: es el valor de los proyectos de reforma registrados hasta julio de 2017 en la Conselleria de Turismo. Los 300 millones son una estimación: tiene en cuenta todos aquellos proyectos de finales de 2016 que no se ejecutaron y que se han ido poniendo en marcha desde que acabó la última temporada y aquellos que se han registrado entre julio del año pasado y este mes. Estos últimos, no obstante, admiten desde la conselleria de Turismo, son "prácticamente ninguno".

Parón desde julio

No obstante, a pesar del parón de nuevos proyectos de reforma desde el mes de julio, serán cerca de 200 actuaciones en los establecimientos con las que se pasará a tener el 75 por ciento de la planta hotelera reformada frente al 65 por ciento que hay actualmente y después de años de desembolso.

Pese a que el negocio hotelero sigue como un tiro en las islas -ahí está no solo la subida de salarios o de precios, sino que sea la segunda comunidad en la que más se invirtió en compraventa de hoteles durante el año pasado- la inversión de los próximos años en reformas no está tan clara tras el parón de los proyectos este año.

Que en el último semestre del año apenas se hayan registrado nuevos proyectos en la conselleria se explica por el fin de una disposición transitoria de la ley turística que facilitaba la inversión y caducó en julio y que el actual Govern la sustituyó por una nueva, más exigente en los requisitos para ampliar nuevas plazas. Que con el fin de esta disposición el parón haya sido tan drástico, en Turismo lo atribuyen a dos factores: a la "avalancha" de proyectos en julio para beneficiarse de la antigua disposición (entre junio y julio se registraron proyectos por el mismo valor que en todo 2016) y que con el 75 por ciento de la planta reformada ya son pocos los establecimientos que quedan por reformar y que, además, con las nuevas exigencias las reformas no les permitirían subir de categoría.

No obstante, confían en que después de la temporada sigan los proyectos de reforma en Balears.

Reunión con los hoteleros

Mientras, en su primera reunión con la nueva presidenta de la Federación Hotelera, María Frontera, la presidenta del Govern, Francina Armengol, prometió al sector batallar por deducciones fiscales en el nuevo Régimen Especial (REB) que Balears está negociando con el ministro Cristóbal Montoro. Entre las medidas que propone Balears y que Armengol explicó a los hoteleros hubo, precisamente, una destinada a mantener viva la inversión hotelera: desgravaciones fiscales por inversiones en innovación tecnológica, en este caso, en los hoteles. Por otra parte, también explicó que el fondo de insularidad a cargo de los presupuestos del Estado con el que ya se ha comprometido Montoro tendrá una línea de inversión para proyectos de innovación en el sector turístico.

La reunión con los hoteleros fue el primer encuentro formal entre la nueva consellera de Turismo, Bel Busquets, y la nueva líder de la patronal hotelera.