En el registro de entrada del Consell Consultiu no hay constancia del envío por parte de la presidencia del Govern del decreto del catalán para el preceptivo dictamen que, aunque no es vinculante, sí es un requisito para completar los trámites antes de su entrada en vigor. A saber, su posterior aprobación en Consell de Govern previa a su publicación en el boletín oficial de esta comunidad autónoma.

Se desconocen oficialmente los motivos de la tardanza por parte de la conselleria de Salud y el Consolat en remitir al órgano consultivo un decreto que endurece las condiciones que marca la ley de Función Pública (4/2016, de 6 de abril) para poder concursar por una plaza en el Servei de Salut Servei de Salutsin acreditar el nivel de conocimiento del catalán establecido para categoría profesional. Un decreto que pasó el trámite de negociación en la mesa sectorial de Sanidad el pasado 17 de noviembre, hace ahora casi dos meses.

Colocar a trabajadores

Fuentes sindicales han barajado que este retraso obedecería a los intereses del Servei de Salut por colocar a determinadas personas que, con este decreto en vigor, no podrían ni siquiera presentarse al concurso oposición o, en el mejor de los casos, tendrían un plazo de dos años para obtener el certificado idiomático desde el momento en que se hicieran con la plaza.

En este último supuesto, el decreto establece que si transcurrida esa moratoria de dos años los trabajadores no presentan el certificado que acredite que tienen el nivel idiomático requerido para su categoría profesional, se les impedirá presentarse a cualquier concurso de traslados o promoción interna convocada por el Servei de Salut.

Esta "penalización" no está contemplada en la ley de Función Pública por la que se están rigiendo los procesos de contratación actuales, previos a la entrada en vigor de un decreto que es más restrictivo a la hora de trabajar en el Servei de Salut sin saber catalán.

Sin ir más lejos, el Servei de Salut ha nombrado en los últimos meses (de agosto a diciembre del año pasado) a tres jefes de servicios médicos de Son Espases -de Hematología, Ginecología y Obstetricia y Cirugía Cardiaca- sin exigirles ningún conocimiento idiomáticosin exigirles ningún conocimiento idiomático, ni en el momento de la oposición ni dentro de dos años. Tan solo se les "sugirió" que debían aprender la lengua propia de las islas.

De la misma manera, en el BOIB del pasado 4 de enero se publicaron otras cinco convocatorias para cubrir otras tantas jefaturas de servicios de Son Espases -Inmunología, Cirugía Ortopédica y Traumatológica, Nefrología, Medicina Interna y Cardiología- sin que entre los requisitos para optar a esas plazas de libre designación figurase el del nivel B2 de catalán que se les exigirá tanto a médicos como enfermeras.

Preguntado por los motivos de esa exención de acreditar el requisito idiomático, el director general de recursos humanos del Servei de Salut, Gabriel Lladó, la justificó en que "se trata de elegir a profesionales muy preparados y con capacidad para liderar equipos de facultativos superespecializados". Y añadió que el hecho de acreditar el conocimiento idiomático de manera previa (como hizo alguno de los candidatos a la plaza) no supondría ninguna ventaja para hacerse con ella. Que tan solo se valoraría la mejor memoria y proyecto para el servicio así como la manera de exponerlo ante el tribunal.

Con el decreto del catalán en vigor, al menos estos jefes de servicio tendrían que acreditar el conocimiento del catalán a los dos años de tomar posesión de la plaza.

"Queda obligado"

El texto referido especifica que "cuando el cumplimiento de las funciones de la plaza requiera una cualificación, unos conocimientos, y unas habilidades directivas especiales, si el personal no puede acreditar el nivel de conocimientos de la lengua catalana correspondiente a la plaza a la que opta, excepcionalmente puede participar en la convocatoria, pero queda obligado a alcanzar el nivel y a acreditarlo en un término máximo de dos años contadores a partir de la fecha de ocupación de la plaza".

Al ser puestos de libre designación, las personas que ocuparan estas jefaturas sí podrían ser desalojadas de los cargos en caso de no acreditar a los dos años el catalán. Cosa que difícilmente se podrá hacer con un adjunto que obtenga su plaza por concurso oposición y se niegue a adquirir en los dos años siguientes el nivel de catalán exigido.

La demora en la remisión del decreto al Consultiu podría afectar a las próximas convocatorias de oposiciones en el Servei de Salutafectar a las próximas convocatorias de oposiciones en el Servei de Salut. Una vez que el texto entra el registro de este órgano con la firma de la presidenta Armengol, el plazo medio para emitir un dictámen de esta complejidad es de unos 45 días.