Los tribunales han vuelto a adoptar medidas cautelares contra Jaume Matas. El tribunal de la Audiencia de Palma, el mismo que dictó la sentencia del caso Nóos, decidió ayer retirarle el pasaporte al expresident del Govern. Una decisión que se produce tres semanas después de que el juez Castro, el mismo día que se jubilabamismo día que se jubilaba, decidiera devolverle al expolítico el documento que le permitía salir del país, considerando que había dado muestras más que suficientes de que no tenía ninguna intención de eludir la acción de la justicia, dado que siempre había acudido a todos los requerimientos que le habían comunicado los tribunales.

Sin embargo, ni a la fiscalía, ni tampoco a la abogacía de la comunidad autónoma les agradó la decisión del juez Castro y, por ello, plantearon a la Audiencia que volviera a adoptar medidas cautelares contra Jaume Matas. Una medida que debía adoptarse, no tanto porque aún tenía pendientes varios juicios, sino porque el expresident había sido condenado en el llamado caso Nóos y estaba pendiente de que esta sentencia se confirmara o se anulara. Por tanto, las acusaciones entendían que debía aplicarse algún tipo de medida cautelar, como ya habían planteado contra otros condenados del caso Nóos, si bien en su momento no fueron aceptadas.

Jaume Matas fue sentenciado a cumplir tres años y ocho meses de cárcel debido a los contratos irregulares, financiados con dinero público, que firmó con el instituto que encabezaba el cuñado del Rey. El expresident no ha ingresado en prisión porque ha recurrido la sentencia de la Audiencia de Palma y confía en que el Supremo acepte su recurso y así evite entrar en la cárcel.

Al no haberse resuelto aún el recurso de los condenados del caso Nóos, todavía en fase de tramitación, la Audiencia de Palma acordó ayer aceptar la petición de las acusaciones. El tribunal valora que Jaume Matas ha sido condenado y entiende ajustado adoptar una medida preventiva, que no es otra que obligarle a que entregue de nuevo el pasaporte (que le devolvieron hace poco tiempo) y comunicarle que no podrá abandonar el país. Es la única decisión que adopta el tribunal, ya que no se le obliga a Matas a presentarse periódicamente en un juzgado, como ha hecho durante mucho tiempo.

Al expresident se le comunicó ayer personalmente esta decisión del tribunal. Acudió a primera hora de la mañana a la oficina judicial y allí se le hizo entrega en mano de la resolución del tribunal del caso Nóos.

Se da la circunstancia que durante los días que ha podido utilizar el pasaporte, y por tanto sin ninguna restricción de trasladarse a cualquier país, el exministro ha realizado un viaje familiar al extranjero. A partir de ahora, debido a que no tiene a su disposición este documento, no podrá viajar al extranjero. Únicamente podrá trasladarse por el territorio nacional. Sólo Matas y Diego Torres han tenido que entregar el pasaporte, ya que el tribunal consideró que Urdangarin no era necesario que lo hiciera.

Matas encara la última etapa de una larga trayectoria judicial que se inició hace ocho años como consecuencia de la investigación del llamado caso Palma Arena. Fue precisamente el juez Castro el que le obligó a volver de Estados Unidos, donde había iniciado una nueva trayectoria profesional tras anunciar que abandonaba la política al perder la posibilidad de volver a ocupar la presidencia del Govern. Después de afrontar un intenso interrogatorio del juez Castro y del entonces fiscal Horrach, Anticorrupción decidió solicitar una elevada fianza económica. Solicitó que Jaume Matas abonara una fianza económica de tres millones de euros y si no lo hacía, debía ingresar en prisión. El juez aceptó la petición de la acusación y fijó dicha fianza. Se le dio un plazo de varios días para abonar el dinero. Matas no tuvo muchos problemas para reunir el dinero y pagar la millonaria fianza, que años más tarde se le devolvió. Desde entonces el expresident ha sido varias veces condenado.