Balears va a registrar durante este año una notable creación de empleo y una intensa reducción del paro, según el pronóstico realizado ayer por el director general de Economía, Llorenç Pou. Esta afirmación se sustenta en la velocidad que la mejoría del mercado laboral ha mantenido a lo largo de 2017 y en unas previsiones de crecimiento económico para el presente ejercicio que se mantienen muy altas por parte del Ejecutivo autonómico. Aunque esa generación de puestos de trabajo no se cuantificó, sí se afirmó que será "importante y superior a la media estatal".

Llorenç Pou aprovechó la presentación de los datos del mercado laboral de diciembre para hacer un balance del conjunto del año. De media, las islas han contabilizado 483.458 afiliados a la Seguridad Social a lo largo de 2017, un 5,6% más que en 2016. Eso convierte a Baleares en la única autonomía que se sitúa ya por encima de las cifras de empleo previas a la crisis en esa media anual y en líder en la generación de puestos de trabajo.

Por lo que respecta al paro durante 2017, la media anual ha sido de 51.491 desocupados, un 11,8% menos que en 2016, lo que coloca al archipiélago como la comunidad que ha conseguido la mayor reducción frente a la crisis y que más se ha acercado a las cifras de 2008, además de ser la segunda que más ha rebajado el paro durante el último año, solo superada por Aragón.

En este último caso, hay algunos elementos especialmente destacados por el director general, como son un recorte en la cifra de desempleados de larga duración en las islas del 19,2%, muy superior a la media del propio archipiélago, o el aumento en las posibilidades de volver a reengancharse al mercado laboral un mes después de quedar parado. Según Pou, en este dato influye no solo la buena marcha de la economía, sino también las políticas activas de empleo que el Ejecutivo balear ha puesto en marcha.

Datos de diciembre

Por lo que respecta al pasado mes de diciembre, la cifra de afiliados a la Seguridad Social en las islas se situó en los 413.770. lo que equivale a un crecimiento del empleo del 4,5% respecto a las mismas fechas de 2016. Esta subida alcanza a todos los sectores y es especialmente intensa en la construcción (10,8%) o la hostelería (5,7%), un dato que Pou consideró especialmente relevante porque conlleva que incluso en temporada baja la generación de empleo en las islas es intensa. Además, valoró el debilitamiento de los contratos a tiempo parcial y el impulso de la contratación indefinida.

En cuanto al número de parados de diciembre, fue de 63.369, con una reducción del 5,3% respecto a 2016. De nuevo todos los sectores presentan una buena evolución, con rebajas interanuales en el desempleo del 17% en la construcción, del 13,6% en la industria o del 4,3% en el comercio.

Otro dato a tener en cuenta es que el paro de larga duración (más de 12 meses sin empleo) está registrando un recorte especialmente intenso, cifrado en un 16,8% interanual.

Por nacionalidades, el desempleo solo crece entre los extranjeros llegados de países de la Unión Europea (con un alza del 2,1%), pero desciende un 6,6% entre los españoles y un 2,5% entre los extranjeros no comunitarios.

Pese a lo expuesto, Llorenç Pou reconoció que quedan sombras en la situación del mercado laboral balear, como el que el 46,1% de los parados de diciembre no cobren ningún tipo de prestación, de ahí que reivindicara la necesidad de que el ministerio de Empleo extienda la protección a los desocupados.