El aumento del impuesto turístico ya está aquí. Desde el 1 de enero, está en vigor la actualización al alza del gravamen, que el Govern prevé que permitirá engrosar con hasta 120 millones de euros las arcas autonómicas, pero que los hoteleros ven como una amenaza a la competitividad del destino los hoteleros ven como una amenaza a la competitividad del destinoante la pujanza que está mostrando el Mediterráneo oriental con vistas al verano de 2018.
El incremento impositivo implica que, a partir de este año, se dupliquen todas las tarifas establecidas para las distintas clases de establecimientos turísticos. De esta manera, el importe más frecuente -el que corresponde a hoteles y apartamentos de cuatro estrellas y tres estrellas superior- pasará a ser de tres euros por persona y día de estancia.
De momento, en el sector hotelero, el efecto que causará en los hoteles de Balears será muy limitado dado el reducido porcentaje de planta abierta en este periodo invernal. Además, hay que tener en cuenta que la regulación autonómica contiene una bonificación del 75% durante la temporada baja en el pago de la ecotasa.
Lo peor, sin embargo,está por llegar, según lamenta el sector hotelero. El presidente en funciones de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), Gabriel Llobera, así lo expresaba ayer.
"Ya se sabe que nosotros somos contrarios a la ecotasa en sí, y es peor aún si la duplican. Hay un sector de clientes que es muy sensible al precio y esto afecta", declaró Llobera, quien recordó que los mercados competidores están emitiendo señales positivas.
En este sentido, mencionó el caso de Turquía y el aumento de reservas que se anuncia para la temporada que viene. "Son mercados que se están recuperando y nos van a quitar clientes. Trabajamos para que esto no sea así, pero la administración no nos está ayudando", lamentó el presidente en funciones de la FEHM.
Efecto sobre los cruceristas
La revisión al alza del impuesto turístico afectará también a los turistas de cruceros. Con el anterior sistema impositivo, los cruceristas estaban exentos de abonar el impuesto turístico si estaban menos de 12 horas en un puerto de las islas. A partir de ahora, en cambio, tendrán que pagar desde el primer momento en que lleguen a Balears.
