El experto en turismo Emiliano DeFerrari, de la Red Europea de Turismo Accesible (ENAT), defendió ayer en unas jornadas organizadas por la ATB y el Centro Baleares Europa el impacto del turismo inclusivo en la reducción de la estacionalidad.

"Las personas con discapacidad necesitan información real sobre accesibilidad. Si un destino no es accesible, no pierde un cliente con discapacidad sino que pierde una familia completa", explicó DeFerrari.

Se prevé que, entre 5 y 8 millones con discapacidad viajan y existen cerca de 30 millones de viajeros potenciales. El experto señaló que este es un segmento emergente en términos de demanda turística y que "crece constantemente" debido a la incorporación de mejoras en infraestructuras, datos, instalaciones concedidas y otros factores.

Las personas con discapacidad suelen ir acompañadas y se estima que por cada persona con discapacidad, viaja un promedio de 1.5 personas con ella. Por ello, "es un turismo que puede mejorar la imagen del destino y no es estacional y tiene un impacto importante en la reducción de la estacionalidad de determinados destinos, especialmente en el caso del turismo de playa", subrayó.