Nueva agresión en el caso Cursach y de nuevo la víctima es uno de los testigos protegidos, que desde hace unos meses, coincidiendo con su decisión de colaborar en la investigación, viene sufriendo constantes amenazas y agresiones. Se trata del testigo protegido número 29, el excamarero de la discoteca Tito's que ha desvelado una serie de graves delitos que se habrían cometido en el local de Cursach. Hace unos meses el testigo ya sufrió una agresión cuando entraba en el aparcamiento de su domicilio. El presunto autor, un individuo de nacionalidad rumana, está en prisión tras ser identificado por el denunciante, si bien mantiene que no es cierto que él sea el agresor.

Como consecuencia de esta primera agresión, directamente relacionada con la investigación de la trama corrupta, se ordenó proporcionar protección policial a este testigo, si bien esta medida no ha resultado eficaz, puesto que no se ha podido evitar esta segunda agresión.

El incidente ocurrió el pasado martes por la tarde, según se narra en la denuncia que presentó. El excamarero notó que alguien le estaba siguiendo o, cuando menos, vigilando. Debido al temor que sufre por las constantes amenazas que ha recibido, el testigo se dio la vuelta para comprobar si alguien le estaba siguiendo. No vio nada extraño. Sin embargo, al volver a darse la vuelta se encontró de frente con un individuo de cabello rubio. La reacción fue inmediata. El otro individuo le propinó un violento golpe en la cara, que le provocó la pérdida de un diente, al tiempo que le dedicaba un insulto por su condición sexual. Al pronunciar esta frase el denunciante se dio cuenta de inmediato que se trataba de una persona de nacionalidad rumana y creía que alguna vez lo había visto en compañía de otro individuo que ahora está en prisión por amenazarle. El agresor salió corriendo para alejarse de inmediato del lugar de los hechos y evitar que la Policía lo detuviera. El agredido desconocía si en ese momento contaba o no con protección policial.

Este excamarero viene siendo acosado desde hace meses por una serie de personas de origen rumano, que podrían estar actuando, según se sospecha, por orden del entorno de Cursach. De hecho, en estos momentos, de las cinco personas que están presas, tres de ellas, todos rumanos, lo están por acosar o agredir a este testigo protegido. Esta agresión se conoció coincidiendo con una vista que se celebró ayer en la Audiencia, en la que se reclamaba la libertad de uno de estos presos. La vista fue muy tensa, debido al enfrentamiento entre el abogado defensor, José Ignacio Herrero y el fiscal Subirán. La fiscalía se opone a la puesta en libertad de este preso, ya que cree que actúa por orden de alguien del grupo Cursach.