La difícil situación política que atraviesa el vicepresidente del Govern y conseller de Turismo, Biel Barceló, volvió a generar un intenso debate en el pleno del Parlament de ayer. La presidenta Armengol tuvo que defender a su vicepresidente aguantando las duras críticas del PP que pedían su cabeza. "Barceló es una máquina de crear crisis de Govern y provoca un cadáver político cada tres meses. ¿No cree que es el momento de que lo destituya?", le espetó la portavoz del PP Margalida Prohens.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, volvió a ejercer de escudo protector para salvar a su vicepresidente y conseller de Turismo, Biel Barceló, ante la fuerte ofensiva del PP y Ciudadanos. Ambos partidos de la oposición exigieron a Armengol la destitución fulminante de Barceló por el caso Contratos y la vinculación de su exdirectora general Pilar Carbonell con el sumario del caso Cursach. La presidenta contraatacó al PP exigiendo que devuelva los 150.000 euros de financiación ilegal. No obstante, se notó que Armengol no estaba nada cómoda, su semblante estaba desencajado, al tener que volver a defender a su compañero de Govern, pero no de partido.

La popular Marga Prohens aprovechó una pregunta a la presidenta para atacar al vicepresidente, consciente de que es el punto débil del Govern: "Es una máquina de crear crisis de Govern y ve pasar un cadáver político cada tres meses. Hay motivos suficientes para que lo destituya", le espetó la portavoz popular. Prohens enumeró el caso Contratos con Jaume Garau, que ha provocado siete dimisiones, la defensa a ultranza de Carbonell, el "ridículo" de la Ley del Alquiler Turístico o la previsión de la llegada de un millón menos de turistas el año que viene.

Xavier Pericay, portavoz de Ciudadanos, también arremetió contra la presidenta por mantener en su puesto al vicepresidente: "Ya puede llover o tronar, pero usted no va a destituir a Biel Barceló. Lo que ocurre es que un Govern debe dar ejemplo y con todo lo que estamos viendo su vicepresidente debe dimitir". Pericay aprovechó para criticar el cambio de criterio de Podemos, a quienes calificó como los "xotets de corneta" del Govern.

Defensa cerrada de Armengol

Francina Armengol realizó una defensa cerrada de su vicepresidente. Con semblante afectado por la ofensiva de sus oponentes, la presidenta tuvo que usar sus artes parlamentarias: "Este Govern ha asumido responsabilidades con medidas muy duras, por encima de cualquier otro Govern, sobre estas cuestiones. Lo que ocurre es que el PP no puede ni debe dar consejos hasta que devuelva los 150.000 euros públicos por el cual fue condenado el partido por financiación ilegal" en la época Matas.

La presidenta también le recordó al PP que en la anterior legislatura tapara el caso Rocamar, la operación de intercambio de hoteles urdida en la conselleria de Turismo.

A Ciudadanos le criticó que a nivel nacional "apoyen al partido más corrupto de la historia". También les afeó que en el Parlament se "olviden de pedir al PP que devuelva los 150.000 euros que debe a las arcas públicas".