El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se mostró ayer "partidario" de que la Subcomisión para el Pacto Social y Político por la Educación del Congreso de los Diputados analice la enseñanza del castellano en varias comunidades autónomas, entre ellas Balears, Cataluña y Comunidad Valenciana, que a su juicio "ha generado mucha polémica y muchos disgustos y el incumplimiento de sentencias".

"Yo lo primero que soy partidario es de hablar" dijo Rajoy. "En esta comisión (del pacto educativo) sería bueno que hablásemos de este asunto que ha generado mucha polémica y muchos disgustos y ha provocado que se incumplan sentencias", añadió. El presidente del Gobierno efectuó estas afirmaciones en una entrevista en la Cadena Cope.

Asimismo, resaltó que "pronto", en la Cámara baja, se va a tratar de la labor y la función de la Inspección educativay advirtió de que se trata de "un tema muy delicado y muy complejo" de afrontar. Para el presidente del Gobierno, "la mejor forma es respetando derechos". De no ser así, según dijo, "sin duda alguna tendremos que ver lo que tenemos que hacer para que esto no se produzca".

Las declaraciones de Rajoy se producen en medio de acusaciones de adoctrinamiento en centros educativo de Balears por el proceso independentista catalán, hasta el punto de que Ciudadanos llevará el asunto ante el Defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán, con el que se reunirá el viernes entregarle un informe en el que ha recogido más de una decena de casos de adoctrinamiento en aulas de las islas, según anunció el portavoz balear de Ciudadanos, Xavier Pericay.