El STEI intersindical evidenció su apoyo a la huelga general convocada en Cataluña contra la aplicación del artículo 155 y comunicó su "rechazo frontal al encarcelamiento de todas las presas y presos políticos", de los cuales exigen su liberación "inmediata". También repudiaron, en un comunicado, las acusaciones de adoctrinamiento que "que se han escampado contra el profesorado catalán y el de las Illes Balears por parte del PP y Ciudadanos".

Quien también se sumó a apoyar la huelga fue el diputado de Més per Menorca Josep Castells, que renunció ayer a intervenir en una comparecencia del conseller de Educación, Martí March, en la comisión de Hacienda y Presupuestos del Parlament, "sumándose así al paro convocado en solidaridad con los presos políticos y en contra de la aplicación del artículo 155 de la Constitución".

Intereses sumergidos

El coportavoz de Més per Mallorca, David Abril, apuntó ayer en declaraciones posteriores a la junta de portavoces del Parlament, que "ya sabemos a quien beneficia que políticos y medios de comunicación hablen solo de Cataluña: al PP y a su corrupción". Así justificaba el ecosoberanista su afirmación: "Justo ayer (el martes) el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) lo certificaba, porque Cataluña ha pasado por delante a la corrupción en cuanto a preocupación, a pesar de todo".

Abril consideró que "tendría que ser una vergüenza para toda persona demócrata que un presidente del Gobierno español como Rajoy no solo no dimita delante de unas evidencias tan claras y graves, sino que se convierta en l presunto defensor de la legalidad".

El portavoz de Més hizo estas declaraciones después de que el inspector jefe de la Unidad de Delitos Económicos y Financiera (UDEF) que investigó la trama Gürtel asegurara el martes que "indiciariamente" el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, percibió sobresueldos de la caja B del Partido Popular.

Antich está a salvo

El PSOE decidió aparcar las sanciones a los dos senadores socialistas que se ausentaron de manera deliberada del Pleno de la Cámara Alta para no tener que votar las medidas del Gobierno para intervenir la autonomía catalana al amparo del artículo 155 de la Constitución. La ausencia de Jose Montilla, expresidente de la Generalitat y único senador del PSC, y de Francesc Antich, expresidente de Baleares, rompió la unidad en las filas socialistas en el Pleno extraordinario que autorizó al Gobierno intervenir la autonomía de Cataluña, sin embargo el grupo socialista en el Senado no ha abordado la aplicación de sanciones y a los senadores tampoco se les ha comunicado nada a este respecto.

Fuentes del Grupo Socialista en el Senado apuntan que la dirección no está centrada ahora mismo en la aplicación de sanciones contra los expresidentes, quienes salieron del hemiciclo minutos antes de que comenzara la votación en la Cámara Alta.