El equipo de gobierno del Consell de Mallorca expresó ayer su "alarma" por el encarcelamiento de los presidentes de ANC y Òmnium, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, una medida que consideró "desproporcionada", por lo que pidió su puesta en libertad. El Gobierno insular, a través de un comunicado, dijo lamentar tener que pronunciarse de nuevo sobre el conflicto catalán, ya que el Estado no lo ha "encarado" a través "de la política y el diálogo, sino con actuaciones policiales y judiciales".

"La política y el diálogo no pueden ser sustituidos por la mano dura. Consideramos totalmente desproporcionada la medida y apostamos por su puesta en libertad", añadió.

La OCB también reclamó la puesta en libertad de Sánchez y Cuixart, cuyo encarcelamiento calificó de "inaceptable". En el mismo sentido se expresó la Assemblea Sobiranista de Mallorca, quien afirmó que la orden de prisión para los dos líderes ciudadanos del independentismo catalán supone "una decisión absolutamente arbitraria y una vulneración flagrante de los más elementales derechos políticos".

A ellos se unieron la Federación de Enseñanza de CCOO, que reclamó la "libertad inmediata" de Cuixart y Sánchez. Junto a ello, el sindicato mostró su rechazo a las denuncias ante Fiscalía contra algunos centros educativos por actos a favor del referéndum y dejó claro su respaldo a los docentes, defendiendo su "indudable profesionalidad". La Confederación sindical de Trabajadores de la Enseñanza (STES) también criticó la "campaña de desprestigio" y "las graves acusaciones" contra el sistema educativo catalán y su profesorado, que se extienden a Balears.