¿Cuál es la dotación del premio que acaba de recibir?
Veinte mil euros para el desarrollo de mis proyectos de investigación durante un año. Se trata del reconocimiento a la trayectoria de los jóvenes investigadores y para participar hay que cumplir una serie de requisitos.
¿Cuáles?
Tener menos de 40 años, haber realizado estancias postdoctorales en el extranjero y haber participado en proyectos en los que figurases como investigador principal. El premio también contempla una visita a uno de los laboratorios de AstraZeneca. En mi caso visitaré uno de sus centros que trabaja en investigación sobre obesidad, mi especialidad, el de Gotemburgo (Suecia).
¿Y por qué le han premiado?
El premio es por la positiva evolución de un proyecto de investigación.
¿A qué proyecto se refiere?
Al proyecto Predimed-Plus, un estudio sobre nutrición y estilo de vida en base a una dieta mediterránea hipocalórica para la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
Hábleme de él.
Se trata de un estudio multicéntrico en el que están participando veintitrés centros de toda España y en el que están colaborando 6.800 personas que tiene como objetivo estudiar de qué manera una intervención en el estilo de vida de estas personas puede reducir el riesgo que tienen de acabar desarrollando una enfermedad cardiovascular.
¿Cuál es el método de trabajo de este estudio?
Dividimos a los voluntarios en dos grupos. Uno de intervención intensivo en el que vemos a los voluntarios hasta tres veces al mes e intentamos cambiar su dieta, que desarrollen más actividad física y que pierdan peso.
¿Y con el otro grupo?
Al denominado de control les ofrecemos consejos de baja intensidad sobre la conveniencia de seguir una dieta mediterránea.
¿A qué conclusión pretenden llegar?
Ya está demostrado que seguir una dieta mediterránea previene la aparición de episodios cardiovasculares y ahora queremos ver si esta dieta combinada con un mayor ejercicio físico y una pérdida de peso es más efectiva en esta prevención que si solamente se vigila la ingesta de alimentos.
¿Cuándo comenzó este estudio y cuál es su duración?
Empezó en el año 2014 y evaluará a lo largo de seis años los eventos cardiovasculares que han tenido los voluntarios de cada uno de los dos grupos.
¿Con cuántos voluntarios están trabajando en Son Espases
Con 335 personas. El protocolo de trabajo es común en todos los centros que participan en el estudio, aunque algunos realizan también subestudios. Aquí tenemos la posibilidad de estudiar como afectan los cambios en la composición corporal.
...
Sí, si el descenso de peso se produce en la masa muscular o en la masa grasa. La grasa visceral, la que se acumula en el abdomen, es peor desde el punto de vista cardiovascular que la grasa subcutánea. En Son Espases tenemos los medios para hacer este subestudio que, además, estará íntegramente financiado con los 20.000 euros del premio que acabo de recibir.
¿De qué medios habla?
Disponemos de una técnica, que es muy cara y que no tienen todos los hospitales, la densitometría dual (DXA) que nos permite saber qué parte de la masa corporal es masa muscular y cuál es masa grasa. Y contamos con un software que nos permite conocer con más detalle la masa grasa y diferenciar en ella la visceral de la subcutánea.
¿Qué pretenden demostrar?
Pretendemos obtener una mayor certeza de que la grasa visceral, la que se acumula en torno al abdomen, perjudica la salud cardiovascular, provoca más diabetes y enfermedades cardiovasculares asociadas a la obesidad.
¿Va a cambiar este premio su trayectoria investigadora?
La impulsará. Trabajo en el Instituto de Investigación Sanitaria de Balears (IdISBa) con un contrato Ramón y Cajal altamente competitivo.
¿Ha mejorado el IdISBa con el mayor apoyo que está recibiendo del Govern
En la gala de la recogida del premio, la subdirectora del Instituto Carlos III, el organismo que financia la mayor parte de los proyectos de investigación en este país, me dijo que Balears lo estaba haciendo muy bien. Que estamos muy bien comparado con antes. Este año hemos conseguido cuatro contratos Miguel Servet. Dos de ellos han permitido volver a Balears a dos investigadores que estaban trabajando fuera. Y es sintomático que hayan decidido trabajar aquí pudiendo elegir otras ciudades del país.
¿Y los otros dos?
Los otros suponen 3 años más de contrato para dos de nuestros investigadores, Gwendolyn Barceló y Carlos Juan. Ahora el IdISBa podrá estabilizar a sus investigadores con contratos indefinidos, lo que les permitirá presentar más proyectos para obtener becas. Y, claro está, nuestras investigaciones estarán sometidas a evaluación, ¡no somos funcionarios!
