En el Consolat de Mar y en la vicepresidencia y conselleria de Turismo del Govern no esconden su indignación ante lo que han llegado a calificar como la "encerrona de Escarrer" durante la inauguración del Palacio de Congresos celebrada el pasado lunes. Además de las críticas a la ecotasa del presidente del Grupo Meliá, Gabriel Escarrer, consideran que la organización del acto y el estudiado y medido monólogo del humorista Agustín El Casta tenían el claro objetivo de "ridiculizar y criticar al ayuntamiento de Palma.

En primer lugar, tanto la presidenta como el vicepresidente ya encontraron "sospechosa" la presencia de medio centenar de personas con banderas españolas a las puertas del palacio que les abuchearon y les pidieron la dimisión. Acto seguido sentó muy mal que el hotelero no hiciera ninguna mención a los más de 120 millones de euros públicos que las instituciones han gastado en el complejo y "se atribuyera todo el mérito". En el Consolat reconocen "que nunca habíamos visto a un concesionario que se dedique a criticarnos y ridiculizarnos".

En el Ejecutivo autonómico están especialmente dolidos por la organización en sí que, según fuentes del Consolat, creen que estaba directamente encaminada "a ir contra el Pacto". La actuación de El Castacon las alusiones al edificio de Gesa, el cambio de nombre de la ciudad y los acontecimientos de Cataluña. Calificaron de "excesiva" la alusión del cómico a la batalla de Llucmajor y los "vivas a la Guardia Civil en un momento político delicado".

De todas formas, en el Govern también arrecian las críticas internas. Desde algunos sectores del Pacto consideran que los servicios de protocolo o desde el Gabinete de la presidenta Armengol y del alcalde de Palma, Antoni Noguera, tendrían que haber controlado y supervisado la organización del evento para evitar situaciones como las vividas el lunes. "No se puede entregar toda la organización a un concesionario que tiene como responsable de comunicación a la que fue jefa de gabinete de Jaume Matas", aseguran desde el Govern en alusión a la periodista Maria Umbert. "Escarrer nos ha metido un gol", añadían ayer desde el Consolat.

Sin permiso para la placa

Tanto el Ayuntamiento como la conselleria de Turismo del Govern, responsables máximos de la Sociedad Pública Palacio de Congreso, no han dado permiso a la cadena Meliá para colocar la placa que descubrió sobre un atril el Rey Felipe VI y que hace referencia a la inauguración del lunes.

Es más, tampoco están por la labor de conceder dicho permiso, por lo que la citada placa no se podrá colocar en ningún muro del palacio. Tanto Govern como Cort argumentan que la inauguración oficial fue con las jornadas de puertas abiertas y no da lugar a más placas.