El sector agrario planteará en las próximas semanas al Govern que habilite fondos de la recaudación de la ecotasa para combatir y paliar los efectos de la plaga de la Xylella fastidiosa sobre el arbolado isleño. Las organizaciones agrarias, especialmente Asaja-Balears, creen que nunca había estado más justificada la inversión en el arbolado, ya que la sustitución de los ejemplares viejos y enfermos supone una mejora ambiental y paisajística para el archipiélago.

Los agricultores argumentan que es un gran avance que la Unión Europea permita eliminar solo los árboles infectados por la bacteria y no aplique el protocolo de erradicación desarrollado en Italia, el que obliga a talar cualquier especie susceptible de contraer la enfermedad en un radio de 100 metros. No obstante, tanto Joan Simonet, gerente de Asaja, como Biel Torrens, secretario general de Unió de Pagesos, recuerdan que aun así serán muchos los árboles que desaparecerán, ya que la Xylella fastidiosa está extendido por todo el territorio insular. "Es imprescindible poner en marcha ayudas para la sustitución del arbolado, tanto con fondos de la Unión Europea como con ayudas propias. Por este motivo, consideramos de vital importancia que el Govern habilite fondos de la ecotasa que permitan a los agricultores sustituir sus almendros viejos o infectados, olivos o viñedos", aseguró Simonet.

Torrens recordó que "el grave problema de los cultivos leñosos de Mallorca no es solo la Xylella, existen otras muchas enfermedades, como es el caso de los hongos, que atacan a unos árboles que son viejos y se han abandonado por la falta de rentabilidad". Desde Unió de Pagesos apuntan que es imprescindible abordar todas estas cuestiones para evitar un impacto paisajístico en una isla que vive del turismo.

La foto de los almendros en flor es una de las más típicas a la hora de vender las plazas turísticas mallorquinas. La paulatina desaparición de almendros por la sequía o los hongos de la leña y ahora con la Xylella fastidiosa hace presagiar que está imagen idílica de Mallorca pueda pasar a la historia. Hay que tener en cuenta que la mayoría de almendros cuentan con más de 100 años de vida y su producción ya es escasa. Todavía quedan en algunas fincas del sur de la isla almendros que fueron plantados a principios del siglo XX para sustituir los cultivos de la viña, afectados por la plaga de la filoxera que arrasó la inmensa mayoría de viñedos de Mallorca.

En los próximos días el Govern debe reunir a la mesa sectorial para abordar la situación de la Xylella, analizar el protocolo de erradicación concedido por la Unión Europea y analizar la repoblación de las especies infectadas. Esta repoblación se debe acordar conjuntamente entre agricultores, ministerio de Agricultura y Govern con el objetivo de sustituir los ejemplares infectados por especies más resistentes a la bacteria. En este foro será cuando los agricultores exigirán al conseller de Medio Ambiente y Agricultura, Vicenç Vidal, la redacción de un plan de actuación urgente para el arbolado y que pida dinero de la ecotasa para su realización.

Un plan de estas características requerirá la inversión de varios millones de euros en ayudas a la sustitución de árboles viejos y a la plantación de nuevas zonas de cultivo. Una de las cuestiones que también deberá decidir el Govern es la fórmula. Los agricultores piden que se habiliten subvenciones y sean ellos mismos, con la supervisión de los técnicos, los que procedan a la repoblación de los árboles viejos o infectados. No obstante, existen muchos campos de cultivo de almendros y de otras especies abandonados y pueden convertirse en un refugio para que la bacteria de la Xylella siga actuando. Esta problemática también deberá ser abordada por el Govern con el sector agrario.

Seis millones de árboles

Hay que tener en cuenta que en Mallorca existen cerca de seis millones de árboles de las especies susceptibles de ser infectados por la Xylella fastidiosa. El cálculo se ha realizado en base al número de hectáreas en producción y el número de árboles por hectárea que contabilizan los ingenieros agrónomos. Por este motivo, se cifran aproximadamente unos 3,8 millones de almendros y algo más de un millón de olivos. A todo ello hay que sumar los acebuches, una especie de la que, al ser silvestre, no existe ningún registro de hectáreas; higueras, cítricos, arbustos, plantas ornamentales... Y así hasta las cerca de 350 especies vegetales que son susceptibles de contagio.

En Mallorca existen15.860 hectáreas de almendros en producción, más otras 7.300 en estado de abandono, según datos de Agricultura.