El metro cuadrado de Mallorca sigue cotizando al alza. Da igual si es un piso sin reformar o una casa de hiperlujo. Lo ha dejado claro en los últimos días la plataforma de alquiler residencial y venta de viviendas idealista.com, que hace unos días colocaba la isla entre las tres zonas de España en la que más se ha encarecido para los residentes el arrendamiento de pisos y ayer ofrecía un ránking de lo más elocuente: casi la mitad de las casas más caras de su catálogo están en Mallorca. Empezando por la que marca el precio récord, con un apellido en euros solo al alcance de fortunas para las que el dinero ha dejado de es una necesidad terrenal para convertirse en pura abstracción: el inmueble de marras cuesta 57,5 millones de euros y está en Alcúdia, donde idealista.com lo vende como una "mansión de estilo italiano sobre la bahía, con ocho habitaciones y más de 3.500 metros cuadrados". Todo a pie de mar y a mano de pocos magnates. El precio es tan elevado que la segunda del ránking cuesta la mitad. Está en Marbella y sale por 27 kilitos de nada, casi los mismos que la tercera del escalafón del ladrillo dorado, una masía de Puigpunyent, descrita como "un edificio del siglo XVII en perfecto estado de conservación, 3.000 metros cuadrados y diez habitaciones", todo por el módico precio de 26,5 millones de euros.

Aunque en este mundo de petrodólares diez veces más vale un jugador de fútbol. Esa certeza relativiza el valor de la cuarta casa del ránking de las más rumbosas de idealista.com. Está en el Port d'Andratx, donde cualquiera que disponga de 24,5 millones de euros de nada puede hacerse con una "finca en Sa Muntanya, en un entorno privilegiado rodeados de palmeras y con su propio helipuerto", que los atascos de la masificación mallorquina son cosa del vulgo, como el ruido (y solo el ruido) de los helicópteros. Y muy cerquita del rugido de las aspas del helipuerto de Sa Muntanya aparece la novena propiedad del escalafón de las más caras, una casa de 1.200 metros con vistas al infinito y más allá que sale en Andratx por 17 millones de euros.

Los precios de la isla solo encuentran así parangón en Marbella, zona de magnate ruso y británico que, como Mallorca, coloca cuatro propiedades entre las más caras. Las migajas del ránking del dispendio quedan así para las dos grandes metrópolis del reino, Madrid y Barcelona, que apenas meten entre la oferta más millonaria una casa cada una, y en ambos casos por debajo de los 20 millones y muy lejos de los 57,5 millones de euros que le ponen en Alcúdia techo al capricho.

Sobran clientes de lujo

Aunque la profusión de millones no es cosa solo de idealista.com. Ni mucho menos. Engels & Volkers y Sotheby's, por citar a dos de los gigantes inmobiliarios del planeta, ofrecen en la isla casas de ese rango de 50 millones. Y aún así, dicen, tienen más clientes interesados en comprar que propiedades de la isla para vender. "Ahora mismo es muy difícil encontrar inventario de propiedades entre los cinco y los diez millones en las isla, para los compradores que hay. Tenemos más demanda que oferta de propiedades de lujo. Y es un negocio que va a seguir creciendo", explicaba a Diario de Mallorca Michael Valdes, vicepresidente internacional de Sotheby's, que desde su despacho en Nueva York observa la demanda de una casa en Camp de Mar con infinity pool, vistas al mar y un precio lejos del presupuesto medio mallorquín: 48,5 millones de euros.