La asociación que agrupa en Balears a los dueños de casas y pisos turísticos (Aptur) ha remitido una nota a sus asociados en la que les aconseja que retiren de agencias y webs tipo AirBNB toda la oferta ilegal de pisos. "Aptur pide a sus socios que cesen en la actividad ilegal", comienza la circular, en la que detallan que, con el actual marco legal todo alquiler vacacional de menos de un mes realizado y anunciado sin la autorización de la Conselleria de Turismo se expone a ser multado con entre 20.000 y 40.000 euros, que se elevan a 400.000 euros de sanción para la plataforma web que dé publicidad a la vivienda.

En Aptur Balears, firme detractora de la reforma impulsada por el vicepresident y conseller de Turismo, Biel Barceló (Més), avisan a sus asociados de que con la Ley Barceló ya en vigor "se elimina el vacío legal que había quedado en la ley", con la consecuencia de que una normativa diseñada precisamente para perseguir el alquiler no autorizado puede aplicarse de forma rápida y contundente. Tanto es así que Turismo ya ha empezado a poner multas.

"Solo se pueden anunciar y comercializar aquellos alojamientos con licencia turística o bien los que presentaron la Declaración Responsable de Inicio de Actividad Turística (DRIAT) antes de la entrada en vigor de la ley. Todas las viviendas que no hayan entregado la DRIAT, no pueden comercializar en la modalidad de alquiler turístico", empiezan diciendo en Aptur. Recuerdan luego a los propietarios que la situación "es temporal": durará como mucho un año, el tiempo que tienen los Consells Insulars y el Ayuntamiento de Palma para definir en qué zonas se puede alquilar a turistas, y qué número de plazas y tipos de vivienda se admiten en cada lugar.

Y hasta que la zonificación quede resuelta, quien hoy no tiene licencia "está ejerciendo una actividad ilegal" si comercializa sin autorización. Y todos los pisos de bloque de viviendas carecen de ella, como consecuencia de que la prohibición del alquiler en pisos implantada por el Govern del PP en 2012 impidió que nadie pudiera legalizar su actividad.

La LAU no sirve

Aún así se hacía, como consecuencia de lagunas ahora corregidas para poder perseguir la actividad masiva e irregular. Del cambio más tajante habla Aptur en su nota de aviso: "La ley considera cualquier alquiler inferior a 30 días turístico por lo tanto nuestros servicios jurídicos consideran que con un contrato LAU (Ley de Arrendamientos Urbanos, la forma pensada para el alquiler residencial) no se evitará que pongan una multa". Informan además de un segundo cambio de peso a la hora de cazar infractores: "Los anuncios [de pisos de alquiler turístico] deberán llevar el número de licencia de turismo o el número de registro de entrada de la DRIAT. Los portales que anuncien propiedades sin el número de licencia podrán ser multados hasta con 400.000 euros", dice tajantemente Aptur, que sí ha entendido con claridad una ley que AirBNB ve "compleja y confusa".

La advertencia de Aptur a sus asociados no es una renuncia a combatir la Ley Barceló. De hecho, comunican que sus servicios jurídicos "analizan las medidas jurídicas que hay que tomar (recursos, Bruselas, Defensor del Pueblo...)". Pero admiten que la prohibición está para durar: "Todas estas vías [de recurso] son lentas".