Biel Barceló, vicepresidente del Govern y conseller de Turismo, ha pedido esta mañana "disculpas" por "la situación generada" tras la aprobación de la ley del alquiler turístico, una normativa que ha nacido con lagunas después de que Podemos tumbara el martes el principal artículo del texto dejando así en el aire el alquiler turístico de pisos y sus sanciones.

"Lo que toca es pedir disculpas, esta situación no se tendría que haber producido nunca. Se había pactado el texto con los consells insulares y ayuntamientos. Había dos posturas: la liberalizadora, que no la queríamos en ningún caso; y la prohibicionista, que había demostrado pocos resultados. Se había conseguido que Palma e Ibiza prohibieran los alquileres, por lo que lo que sucedió en la votación no tuvo ni pies ni cabeza. Tenemos que reconducir la situación", ha subrayado Barceló.

En todo caso, el conseller ha defendido la necesidad de la ley. "Tiene cuestiones positivas y muy importantes. Trabajamos con Podemos para llegar a una solución en el artículo 49. No cuadra y es incongruente con el resto de la normativa", ha señalado Barceló, que hace dos días calificó la normativa de 'Frankenstein'.

Asimismo, ha respondido con rotundidad a la petición del presidente del PP, Biel Company, de pedir elecciones anticipadas por todo el lío generado con la aprobación de la ley. "Hemos conseguido que Company diga alguna cosa desde que preside el PP. Está mudo en el Parlament y aparte de ir a alguna feria, no le hemos oído. Pedir elecciones está fuera de lugar, es absolutamente impensable y no tiene ni pies ni cabeza", ha zanjado el vicepresidente del Govern.

Apoyo al referéndum independetista catalán

Por la mañana, Barceló se ha reunido con el consejero de Asuntos Exteriores de Catalunya, Raül Romeva, de visita en Mallorca para visitar la fosa de sa Coma donde se calcula que hay enterrados 400 combatientes de la Guerra Civil, la mayoría catalanes.

El vicepresidente ha reiterado el apoyo del Govern al referéndum independentista del 1 de octubre: "Apoyamos la democracia y que la gente exprese su voz. Ya hubo un pronunciamiento del Parlament en el se instó al diálogo y a buscar soluciones políticas frente a las soluciones represivas. Decidir nos debe unir a los que nos consideramos demócratas".

Romeva, por su parte, ha defendido una consulta que, considera, quiere "una grandísima mayoría" de catalanes. "Se trata de saber qué piensa la gente en un contexto libre y democrático. Que podamos dejar de especular y saber qué quiere la gente, y aceptar cualquiera que sea el resultado.

Es indiscutible que una grandísima mayoría de catalanes considera que la situación actual solo puede resolverse por la vía democrática. No con imposiciones y amenazas. Eso es lo que dicen todas las encuestas, sin excepciones. La gente quiere decidir por ella misma, eso es indiscutible", ha sentenciado.