El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJIB), Antonio J. Terrasa, considera, respecto a la situación actual de la Justicia en las islas, que "si las carencias fueran un reto", habrían "batido todos los récords".

"Es tradicional la escasa dotación de medios, pero no es solo una cuestión de medios insuficientes sino de una organización ineficaz que lastra en buena medida la capacidad de dar una respuesta eficaz", manifiesta Terrassa en una entrevista

"La comparación no debe hacerse con otras dotaciones de otros ministerios", explica, "sino con los promedios de la Unión Europea ya que, tal como asegura, "se está por encima de la media en asuntos y por debajo de la media en jueces". Así, añade que "lo que hay que hacer, se sabe desde hace 30 años, es diseñar una estrategia de Estado a largo plazo para Justicia".

"No solo es cuestión de insuflar muchos más recursos económicos sino especialmente llevar a cabo una organización eficiente", incide. "A mi juicio, la organización de la Justicia es defectuosa o al menos no es suficientemente eficaz", reflexiona el presidente del TSJIB.

Antonio Terrassa admite que "es una realidad que la justicia es lenta" pero cree que la situación en España no está "tan alejada de países de su entorno porque siempre va a remolque de los acontecimientos".

"Los últimos en llegar a los acontecimientos son los jueces, entre otras cosas, porque a veces son el último remedio", asegura.

Sobre el criterio de los jueces a la hora de imponer penas, Terrasa considera que "la justicia humana tiene el déficit propio de la naturaleza humana".

"Si quisiéramos una justicia más estandarizada, cualquier máquina sería capaz de hacerlo con más exactitud, pero probablemente ese no es siempre el objetivo perseguido; hay matices que pesan mucho a la hora de decidir", argumenta. Además, "ningún juez decide por sí solo y siempre está la posibilidad de recurrir".

En relación a los juzgados de la mujer en Balears, el presidente del TSJIB señala que, si bien Eivissa tiene "poca carga", los dos de Palma ""se ven necesitados de un tercero" porque "la carga" de trabajo "excede lo razonable".

Respecto a las filtraciones a los medios u otras anomalías similares durante los procesos judiciales, considera "es más importante la reparación que la prohibición".

"No es tanto una cuestión de frenos previos, como podría ser el secreto sumarial, sino de que se den las reacciones adecuadas si se produce una anomalía", manifestó. El presidente del TSJB señala que las actuaciones en fase de investigación, deben ser, no sabe "si secretas, pero al menos reservadas" porque si no es así se podría "perjudicar la imagen de la dignidad de las personas" dentro de un asunto que puede estar "pendiente de esclarecer".

Sobre este tema, considera que "la intensidad de restricción informativa es elástica en función del momento procesal y de la situación".