La aerolínea Iberia prefiere dar cuanto antes el carpetazo al espinoso tema de las pruebas de embarazo a las que sometía a las aspirantes a entrar en su plantilla, y ha decidido pagar la multa de 25.000 euros impuesta por la Inspección y por la conselleria de Trabajo, renunciando a la presentación de un recurso ante los Tribunales, según ha informado uno de sus portavoces. Desde el ámbito laboral se destaca que el "daño reputacional" que la empresa está registrando a causa de este tema es superior a la cuantía de la sanción, lo que explica que el objetivo de la citada compañía aérea sea pasar página.
Diario de Mallorca adelantó el pasado domingo en exclusiva que Trabajo ha impuesto una multa de 25.000 euros a Iberia por exigir a las mujeres que aspiran a entrar en su plantilla que se realicen pruebas médicas para determinar si están embarazadas. Según la Inspección (postura respaldada también por la Conselleria), esa práctica supone una infracción muy grave en materia laboral al conllevar una patente discriminación por cuestión de sexo.
La publicación de esta noticia generó en las redes sociales una inmediata reacción de protesta y de duras críticas por la exigencia de este test de embarazo. El mismo domingo Iberia decidió anunciar que retiraba esa exigencia en sus pruebas de acceso, y ayer dio un paso más al comunicar que aceptaba el pago de la sanción y renunciaba al recurso.
Rechazo de la ministra
La repulsa ante las prácticas de compañía área ha partido incluso del Gobierno central: la ministra de Sanidad e Igualdad, Dolors Montserrat, ha expresado su "máximo rechazo absoluto" ante esa exigencia, alegando que "la maternidad no puede ser ningún tipo de discriminación y obstáculo para acceder a un puesto de trabajo; cualquier empresa española no tendría que pedir información personal a ninguna de las personas que quieren optar a uno".
Ese rechazo ha sido especialmente duro desde Balears, donde se descubrió el caso, y tanto el conseller de Trabajo, Iago Negueruela, como los responsables de UGT y CC OO en las islas han reclamado al Ejecutivo de Mariano Rajoy que endurezca las sanciones que actualmente se aplican ante infracciones en materia laboral. Como ejemplo, Negueruela recuerda que una falta muy grave en este tema puede ser multada con un máximo de 180.000 euros, cuando se alcanzan los 800.000 en el ámbito de la salud laboral. Además, tanto el secretario general de UGT en las islas, Alejandro Texías, como la secretaria de Acción Sindical de CC OO-Balears, Eva Cerdeiriña, defienden que una multa de 25.000 euros es claramente insuficiente y califican de "vergonzoso" e "inaceptable" lo sucedido en Iberia. También han anunciado que se está manteniendo un contacto constante con el comité de empresa de la citada aerolínea para evitar que situaciones similares pueda repetirse.
En cualquier caso, el conseller Negueruela pone en valor el que una actuación como la que se ha dado en la aerolínea haya sido detectada y denunciada gracias a la colaboración entre dos conselleries, lo que ha dado pie a la sanción y a que la empresa se haya visto obligada a modificar su política de contratación.
En este aspecto, la consellera de Presidencia, Pilar Costa, desveló ayer que la denuncia contra Iberia nace de la queja presentada ante el Institut Balear de la Dona por una mujer que se negó a realizar las pruebas de embarazo que Iberia le pedía. Desde ese organismo se informó de estos hechos ante la dirección general de Trabajo, que a su vez los puso en conocimiento de la Inspección.
Tanto Negueruela como Costa han recordado las medidas contra la violencia de género y contra la discriminación de la mujer que se han puesto en marcha en Balears mediante la colaboración entre ambos departamentos.
Igualmente se ha recordado que la Inspección de Trabajo en Balears ha planificado más de 90 controles a realizar durante este año vinculados a la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, entre ellos de vigilancia sobre discriminación en el acceso al empleo.
También los secretarios generales de CC OO y de UGT en el ámbito estatal, Unai Sordo y Pepe Álvarez respectivamente, han reivindicado actuaciones más contundentes ante situaciones como la vivida en Iberia, y han destacado el agravante de que se trata de una gran empresa llena de "asesores y técnicos", lo que hace aún más injustificable lo sucedido.
Iberia cambia su política
Iberia ha optado por remitir un comunicado anunciando que deja de exigir las pruebas de embarazo a las mujeres que aspiran a entrar en su plantilla, al tiempo que su portavoz ha confirmado que se va a optar por abonar los 25.000 euros de la sanción y renunciar a la vía de recurso contra esa resolución.
En cualquier caso, la aerolínea insiste en que la inclusión de los análisis para determinar si una aspirante está embarazada no han pretendido nunca limitar el acceso a las mujeres, sino adoptar las medidas previstas para garantizar la salud de la embarazada y de su hijo. Así, se asegura que Iberia nunca ha dejado de contratar a una mujer por estar embarazada y se destacan todas las iniciativas que se aplican para evitar riesgos y favorecer la conciliación de la vida laboral y familiar.
