Un sector de Podemos está dispuesto a que el partido entre en el Govern para gestionar algunas áreas de peso en los dos años que restan de legislatura. No obstante, no lo tendrán nada fácil. Se encontrarán con la oposición frontal de sus socios izquierdas que no están por la labor. Prefieren que los podemitas sigan dando apoyo externo. Tanto desde el PSIB como desde Més oficialmente ya se han pronunciado argumentando que no es el momento idóneo. Pero en privado mantienen argumentos de mucho más peso, como es el caso de tener que desmontar el Govern para dar entrada a los podemitas o incluso incrementar el número de conselleries. Ambas soluciones tendrían muy difícil justificación ante la opinión pública isleña.

La propia presidenta del Govern, Francina Armengol, sabe que claudicar a las exigencias de Podemos podría perjudicarla. Asimismo, consideran del todo injustificable ante la sociedad quitar conselleries de un partido para dárselas a Podemos o crear nuevos departamentos para los podemitas, cosa que incluso sería más negativo para el conjunto del Pacto de izquierdas. Armengol ha repetido en varias ocasiones a lo largo de su mandato que no se le caerían los anillos si debe gobernar en minoría, en el hipotético caso de que Podemos le retire su apoyo por no entrar en el Govern.

La entrada en el Ejecutivo es una apuesta personal del secretario general de Podemos, Alberto Jarabo, quien está intentando consultar a la militancia si deben asumir cargos en el Ejecutivo autonómico, incluso antes de la celebración de las primarias previstas para después del verano. No obstante, Jarabo tiene oposición interna a su iniciativa. En concreto, la portavoz parlamentaria y precandidata a las primarias, Laura Camargo, no entiende la "urgencia" e incluso es partidaria de elevar el nivel de exigencia al Ejecutivo de Armengol.

Podemos sabe que sus votos son fundamentales para que el Govern, que ahora forman PSIB y Més, pueda aprobar los presupuestos. Por ello, se sienten fuertes a la hora de exigir conselleries o incluso una vicepresidencia que sería, según fuentes del Pacto, para "contentar" a Alberto Jarabo que dejará de ser el líder morado.

"No es el momento oportuno"

Ayer portavoces del PSIB y Més ya se apresuraron a enviar mensajes a sus socios podemitas para que cesen con su intención de entrar en el Govern. El vicepresidente y líder de Més, Biel Barceló, aseguró al respecto: "Lo lógico era que hubieran entrado a principio de legislatura, el verano de 2015, y no ahora. En estos momentos y en los dos años de mandato que aún quedan, debemos consolidar los proyectos puestos en marcha y la entrada de Podemos supondría modificar gran parte de la estructura del Ejecutivo", apostilló Barceló. El vicepresidente del Govern indicó que esta posibilidad es un "debate interno de Podemos" en el que recordó que hay oposición interna.

Por su parte, desde el PSIB se manifestaron en la misma línea que Barceló. La secretaria de organización socialista, Bel Oliver aseguró que "no es el momento oportuno de que Podemos entre en el Govern". Oliver recordó que estamos en el ecuador de la legislatura y es una mala época para acometer cambios importantes en la estructura del Govern.La socialista añadió que este planteamiento que realiza Jarabo "responde a una cuestión de liderazgo suya dentro de su propio partido".