Los técnicos de la Comisión Europea avisaron la semana pasada al Govern de que no podrá evitar, por ahora, las medidas de erradicación previstas contra la plaga de Xylella fastidiosa, que pasan por la tala de toda especie susceptible de ser infectada a cien metros a la redonda de cada caso detectado. La bacteria afecta desde almendros, olivos o viñas hasta acebuches o plantas ornamentales, por lo que supondría la destrucción de cientos de hectáreas de árboles, plantas y arbustos en Balears.

Los técnicos aprovecharon su auditoría en las islas para comunicar a la Conselleria que Bruselas no avalará las medidas de contención en Balears, que por su cuenta lleva meses aplicando el Govern y que suponen solo la tala de los árboles infectados. Según fuentes de Medio Ambiente, los auditores trasladaron que la contención se concederá a la isla francesa de Córcega por llevar ya dos años erradicando, un escenario distinto al del archipiélago.

El informe de los técnicos, que analizaron la semana pasada la situación de la Xylella en Balears, no se espera hasta después del verano. Sin embargo, por lo que transmitieron los auditores durante su visita, Balears debería volver a la tala de todo ejemplar susceptible de infectarse a cien medros a la redonda de cada caso detectado de la bacteria, al menos un par de años antes de que Bruselas bendiga la contención en las islas.Bruselas ya avisó en febrero

Balears no aplica la erradicación desde los primeros casos encontrados en cerezos y polígalas en un vivero de Porto Cristo, a finales del pasado mes de octubre. De hecho, la misión de la Comisión Europea en Balears, cuyos trabajos siguen ahora en Andalucía y en la Comunidad Valenciana, aplaudió la ejecución de las medidas en Porto Cristo, donde se arrancó todo en cien metros a la redonda del vivero y que costó 40.000 euros en indemnizaciones.

En la actualidad, el Govern tiene contabilizados hasta 252 casos de Xylella en las islas, que afectan principalmente a almendros, olivos, acebuches, plantas ornamentales e incluso una viña en Mallorca. Por ello, la conselleria de Medio Ambiente ha mantenido desde un principio que la erradicación no es posible y se ha limitado a aplicar el denominado plan de contención, lo que choca con la actual normativa europea.

En declaraciones a Diario de Mallorca el pasado mes de febrero, el portavoz de Salud y Seguridad Alimenticia de la Comisión Europea, Enrico Brivio, hablaba por primera vez de la situación de la plaga de Xylella en Balears y, sin ni tan solo mencionar la posibilidad de la contención, ya señalaba que "las medidas de emergencia contra la Xylella [las medidas de erradicación] son a nivel europeo, así que son de aplicación no solamente en Apulia (Italia), sino ahí donde haya un brote en Europa", lo que alejaba a las islas de poder salvarse de la tala masiva.

Sin embargo, que la Comisión Europea se haya abierto en las últimas semanas a cambiar su normativa al respecto para extender las medidas de contención -concedidas hasta la fecha únicamente a la región italiana de Lecce- a zonas donde la plaga ya está muy extendida, como Córcega, parecía poder beneficiar a Balears en su lucha porque Bruselas le permita evitar la tala masiva prevista en el drástico plan de erradicación.

Alegaciones al informe

El mensaje de los técnicos, que evaluaron la situación de la plaga en las islas y cuyo informe será remitido al Comité de Plantas, Animales y Alimentación, que tendrá la última palabra sobre las medidas a tomar en el archipiélago, supone un jarro de agua fría para los planes de Medio Ambiente.

No obstante, con la previsión de que el informe de los auditores no estará antes de que acabe el verano, de que el Govern presentará alegaciones a las conclusiones y contando con los tempos en los que se maneja la Comisión Europea, el aviso de los técnicos no se materializará antes de finales de este año, lo que permitirá a Medio Ambiente seguir evitando la tala masiva durante varios meses.