"Queremos acoger a personas refugiadas y queremos hacerlo ya". "Palma habla en plata: queremos acoger". Así lo proclamaron ayer el Ayuntamiento de Palma y el Consell de Mallorca quienes, con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas, mostraron su apoyo hacia las personas que están huyendo de sus países en guerra y piden refugio en Europa.

Concretamente, desde el Consistorio palmesano se colgó una pancarta con el lema No més morts, obrim fronteres en el balcón del edificio.

El regidor de Igualdad, Juventud y Derechos Cívicos, Aligi Molina, junto a la regidora de Bienestar y Derechos Sociales, Mercè Borràs, la regidora de Función Pública, Aurora Jhardi, la regidora de Sanidad y Consumo, Antònia Martín, la regidora de Educación y Deportes, Susanna Moll y el regidor de Infraestructuras y Accesibilidad, Rodrigo A. Romero fueron los encargados de desplegar la pancarta.

"Palma habla en plata: queremos acoger. El gobierno español tiene que asumir sus compromisos", señaló Molina.

Minuto de silencio

Por su parte, desde la institución insular se guardó un minutos de silencio en todas las dependencias y se mandó el mensaje al Gobierno de que "Mallorca quiere acoger".

El presidente del Consell, Miquel Ensenyat, acompañado por todo el equipo de gobierno y de los consellers electos y trabajadores, salieron a las puertas de las dependencias de la institución.

De este modo, el Consell se sumó a las distintas instituciones de todo el estado que piden una mayor celeridad a la hora de aceptar las solicitudes de asilo, para poder dar una acogida a todas estas personas que huyen del dolor y del horror, y que además son víctimas del tráfico de personas.

"Queremos acoger a las personas refugiadas y lo queremos hacer ya", señaló Ensenyat el lunes durante otro de los actos celebrados por la institución insular para mostrar su compromiso con este drama humanitario.