El juez Penalva, como pieza separada, ha dictado un auto de apertura de juicio oral contra Marian C.S., un ciudadano rumano, considerado un matón, que se sentará en el banquillo acusado de amenazar a varios testigos del caso Cursach. Este extranjero, que en estos momentos está en prisión,

Este ciudadano rumano, que trabajó en dicha discoteca del Paseo Marítimo, regresó a Mallorca la misma semana del ingreso en prisión de Cursach. Las amenazas las sufrió un exempleado de la discoteca, que como testigo protegido ha contado hechos muy graves ocurridos en Tito's. La acusación detalla que el ciudadano rumano habló con una mujer en un bar del Paseo Marítimo y le manifestó un plan de "quitar de en medio" a dicho testigo protegido. Planteaba un plan para matarle, que consistía en meterlo en el coche y lanzarlo por un puente para simular un suicidio.

El acusado, además merodeó varias veces por el domicilio del testigo. Iba acompañado por un compatriota, que tras ingresar en prisión decidió colaborar con el juzgado. Manifestó su temor a las represalias que pudiera hacerle el acusado, que destaca por su fuerte complexión física.