La conselleria de Cultura y Transparencia que dirige Ruth Mateu dividió en mayo de 2016 el pago de 43.000 euros entre dos empresas distintas, para un mismo estudio. Por un lado, encargó al director de campaña de Més, Jaume Garau, un análisis sobre el "Impacto Económico de las Actividades Culturales y Hábitos de Consumo Cultural en Balears". El importe fue de 21.538 euros. Por las mismas fechas, contrató por 21.417 euros a la empresa Psyma Iberica Marketing Research SL -colaboradora de Garau en otros contratos con el Govern- para realizar las encuestas del mismo estudio.

Ambos encargos fueron adjudicados a dedo. El análisis de los "hábitos culturales" se fraccionó para permitir que la Conselleria de Mateu pudiera adjudicarlo por la vía directa al estratega electoral de su partido.

Cultura pudo otorgar el encargo a las dos empresas mediante sendos contratos menores -es decir, sin concurso público- al no rebasar la cuantía máxima que la ley permite para este procedimiento de contratación (21.780 euros, IVA incluido). De haberse tenido que adjudicar el estudio como un solo encargo a una misma empresa, su importe de 42.955 euros habría obligado a adjudicarlo mediante otra fórmula.

De este modo, Cultura contrató paralelamente un análisis a Jaume Garau titulado el "Impacto Económico de las Actividades Culturales y Hábitos de Consumo Cultural en Balears", por 21.538 euros, y los "trabajos técnicos para la realización de 1.600 encuestas sobre hábitos de consumo de la cultura en Balears", por 21.417 euros.

1.600 encuestas

En la metodología que Garau propone a la Conselleria de Ruth Mateu para adjudicarse el estudio, cifra en "1.600 encuestas válidas" las necesarias para llevarlo a cabo. La cantidad es idéntica al sondeo contratado para el mismo objeto a Psyma Ibérica.

Esta empresa es la misma que Jaume Garau subcontrató para el informe sobre el "tejido empresarial de Balears" que el vicepresidente del Govern, Biel Barceló -también de Més- le adjudicó a dedo por 55.600 euros. En ese caso fue mediante un procedimiento negociado sin publicidad.

Al fraccionamiento de este contrato para poder otorgarlo a dedo, se suma que el departamento de Ruth Mateu ocultó éste y otro estudio -el relativo al público de la Orquestra Simfònica- encargado al jefe de campaña de los econacionalistas. De los cinco contratos entregados a dedo a Garau desde conselleries de Més, sólo los dos trabajos de Cultura no han sido publicados en el portal de Transparencia del Govern, cuya responsable política es precisamente la consellera Mateu.

Este diario no pudo contactar ayer con el director general de Transparencia del Ejecutivo, Miquel Gallardo, para conocer porqué precisamente estos dos contratos a dedo, no han sido colgados en su web, a diferencia de otros fechados con posterioridad. Desde la Conselleria remitieron a la comparecencia de Ruth Mateu en el Parlament la próxima semana para dar respuesta a ello.

A lo que sí respondió la Conselleria fue al hecho de que la "propuesta de trabajo técnico" presentada por Garau para su estudio de la Orquestra Simfònica figurara un calendario para el trabajo de campo fechado en 2015, cuando la adjudicación no se efectuó hasta 2016. En concreto, Garau ofrecía hacer una encuesta "en los meses de marzo a mayo de 2015" para conocer y analizar el perfil de los espectadores de la temporada de conciertos de la Simfònica. La referencia a "mayo de 2015" aparece por dos veces en el informe previo. Por esas fechas aún gobernaba el PP de José Ramón Bauzá. Més no accedió al Govern hasta unos meses después.

Una portavoz oficial de la Conselleria se limitó a atribuir este hecho a "un error". Sin embargo, este dato, así como la utilidad del estudio, generan dudas en el seno del Govern. De los distintos contratos dados a dedo por las conselleries de Més a su jefe de campaña -que suman un valor global de 154.000 euros-, los dos trabajos del departamento de Mateu, adjudicados por unos 21.500 euros cada uno, son los que suscitan más suspicacias.

"No me gusta esta historia"

Después de la publicación en las páginas de este diario de hasta seis contratos entre conselleries de Més y Jaume Garau haya desatado una tormenta política en el Govern y en la propia formación, la consellera Mateu se desentendió en un chat interno del partido de los contratos de su área asegurando: "No puedo controlar todos los contratos menores". La consellera en la picota aseveró también sobre las polémicas contrataciones al director de campaña de Més: "No me gusta nada esta historia".