"Todavía estoy poniendo orden [...], yo no puedo controlar todos los contratos menores". La consellera de Transparencia y Cultura, Ruth Mateu, de Més, se desmarca ahora del pago de casi 43.000 de los 154.000 euros públicos en contratos a dedo al estratega electoral de su partido, Jaume Garau. Una práctica destapada el domingo por Diario de Mallorca y que está laminando la imagen del partido ecosoberanista.

De abril a junio del año pasado, Mateu otorgó 42.713 euros a Garau, mediante adjudicaciones sin concurso público.

En un chat de mensajería móvil que maneja la cúpula de Més, la propia consellera se mostraba ayer molesta con este capítulo que sacude a su formación. "No me gusta nada esta historia", compartió Ruth Mateu con otros dirigentes. Ello no obstante, en el mismo foro la titular de Transparencia del Govern protesta porque "si a partir de ahora no podemos dar ningún contrato menor a empresas afines, aunque presenten la mejor oferta ¡estamos apañados!".

La cartera de Mateu es una de las tres de Més que desde el Govern ha contratado a dedo a las dos empresas de asesoría de Garau. En su caso se trata de dos trabajos muy distintos entre sí, prácticamente por el mismo importe: en abril de 2016 encargó a Garau un " Estudio de públicos de la Orquestra Simfònica de las Illes Balears", por valor de 21.175 euros. En menos de dos meses, la misma Conselleria adjudicó al jefe de campaña de Més el estudio "Impacto económico de las actividades culturales y hábitos de consumo cultural de las Illes Balears". El importe fue de 21.538 euros.

"Ningún contrato como toca"

La utilidad del estudio adjudicado a Garau sobre la Simfònica es uno de los aspectos que suscitan más dudas, manifiestan fuentes del Govern a este diario.

Consultores de Políticas Comunitarias, una de las dos consultorías de Garau, cobró 21.175 euros por "analizar el perfil" de los espectadores de la orquesta.

Un dato llamativo es que la adjudicación a Garau se efectuó "en abril de 2016". Sin embargo, en la "propuesta de trabajo técnico" que el empresario de Més presentó previamente a la Conselleria figura un calendario para el trabajo de campo fechado un año antes. En concreto, Garau ofrecía hacer una encuesta "en los meses de marzo a mayo de 2015" al público de la temporada de conciertos de la Simfònica. La referencia a "mayo de 2015" aparece por dos veces en el citado informe previo. Por esas fechas aún gobernaba el PP de José Ramón Bauzá. Més no accedió al Govern hasta unos meses después.

Tras desvelar ayer este periódico estos dos trabajos, ayer Ruth Mateu dio explicaciones en el mencionado chat interno. "La Orquestra Simfònica no ha hecho nunca ningún contrato como toca", asevera rotunda la consellera de Transparencia y Cultura a sus colegas. El contrato en cuestión, dice Mateu, "y la necesidad del estudio se decidió por la Junta del Consorcio [de la Simfònica]. No el procedimiento ni nada", desvincula a este órgano del método de contratación por vía directa a Jaume Garau.

Señala a sus subordinados

"Todavía estoy poniendo orden, pero de cómo se hacía a cómo se hace hay un abismo", defiende Ruth Mateu la mejora de la gestión desde su llegada. "Ahora bien -añade-, tengo cuatro organismos públicos y yo no puedo controlar todos los contratos menores de los mismos", descarga implícitamente la responsabilidad de lo ocurrido en sus subordinados. Se trataría de los responsables de la orquesta, por un lado, y de la gerencia del Institut d'Estudis Baleàrics (ahora Illenc), por el otro. Este último organismo fue el que formalizó el 9 de mayo de 2016 la adjudicación a Jaume Garau del estudio sobre el impacto económico de los eventos culturales en Balears. En ambos casos la cuantía es similar y no excede los 18.000 euros, límite que habría impedido su adjudicación a dedo.

La consellera Ruth Mateu parece no secundar la contratación sin concurso del estratega electoral de su partido; pero a la vez rechaza dejar de contratar a empresarios próximos que ofrezcan ventajas económicas: "No me gusta nada esta historia, pero he de decir que si a partir de ahora no podemos dar ningún contrato menor a empresas afines aunque sean [sic] la mejor oferta, ¡estamos apañados!".