El coordinador nacional del PP, Fernando Martínez-Maíllo, inauguró el XV congreso del PP balear con una constante llamada a la "unidad" tras la dura campaña por el liderazgo entre Biel Company y José Ramón Bauzá, trasladando así implícitamente la preocupación de Génova. "Todos somos PP", insistió Martínez-Maíllo. Aunque el resto del día Company y Bauzá apenas se cruzaron ni hablaron, en presencia de Martínez-Maíllo se dieron un abrazo que sirvió para que el número 3 del PP nacional mostrara su confianza en que se recupere la unidad tras el congreso. "Biel, José Ramón, me ha gustado mucho el abrazo que os habéis dado porque demuestra que estáis a la altura de las circunstancias y que de aquí va a salir un partido fortalecido", les dijo a los dos rivales, que volvieron a repetir el gesto por la tarde. Eso sí, con frío de por medio.

Martínez-Maíllo tuvo cuidado en no mostrar las preferencias de la dirección nacional por ninguno de los dos aspirantes, a los que definió como "dos personas conocidas y con trayectoria", y trasladó el "máximo respeto a los dos y a lo que se decida" hoy en las votaciones para elegir al nuevo presidente del partido, del que dijo que será "el próximo presidente del Govern" en 2019, insistiendo de nuevo en que ese objetivo pasa por la unidad.

Errores pagados en las urnas

Afirmó que el PP había cometido "errores y la gente nos ha censurado en las urnas", pero sostuvo que se "hn madurado y aprendido de los errores de alguno". Enfatizó que en Balears el PP es "el referente para muchos ciudadanos" que esperan su regreso en 2019. En este contexto, aprovechó para arremeter contra el Govern de la socialista Francina Armengol, "en manos de radicales y nacionalistas", y sostener que "hay un Gobierno sensible" con las islas, "el de Mariano Rajoy".

Martínez-Maíllo dedicó bastante tiempo a la moción de censura presentada en Murcia por el PSOE contra el popular Pedro Antonio Sánchez, respecto a la cual pidió "paciencia" a Ciudadanos "hasta que decida un juez" sobre los delitos por los que se investiga al presidente murciano. "Hemos de ser implacables con la corrupción, pero también justos con los nuestro", declaró provocando un fuerte aplauso entre los asistentes.

El dirigente estatal no olvidó lanzar una andanada contra Podemos, partido que "echa a los periodistas porque le molesta la transparencia y la crítica", con lo que "se descalifica a sí mismo". El número tres del PP lanzaba esta acusación mientras los periodistas que cubrían el cónclave seguían su intervención a través de un plasma, dado que no se les permitía estar dentro de la sala principal.

Martínez Maíllo abandonó Palma nada más inaugurar el congreso, y estuvo precedido por Miquel Vidal, presidente interino del PP balear, quien también se centró en la llamada a la unidad. "Pido unión, que nos perdonemos unos a otros, que el concepto de partido y nuestra ideología esté por encima de nuestras sensibilidades", dijo Vidal, quien emplazó a los populares a que no les "separen minucias".

"Hemos de saber aceptar los sentimientos mayoritarios sin levantar el culo, ya me entendéis", añadió en clara referencia a Bauzá, previsible perdedor de este congreso.