Los dos policías locales de Palma, que llevaban en prisión desde el pasado mes de octubre, acusados de episodios de homofobia contra una compañera que es lesbiana, han abandonado esta tarde en el centro penitenciario. Su puesta en libertad la ha ordenado esta mañana el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma, que ha aceptado el recurso que había presentado el abogado defensor José Ramón Orta, contra la decisión del juez de denegar la libertad de los dos policías, justificando esta decisión por las amenazas que había sufrido la denunciante y una de las testigos del caso.

La Audiencia entiende que en estos momento el riesgo de que puedan repetirse estas amenazas es menor, por cuanto la denunciante disfruta de protección policial. Entiende el tribunal que su protección puede asegurarse a través de otras medidas menos gravosas que la prisión preventiva. Por ello, ordena a los dos policías que no pueden aproximarse a menos de 500 metros ni a su compañera lesbiana ni a la testigo. Comunicación que no puede producirse ni en sus domicilios, lugar de trabajo u otros sitios donde se encuentren estas dos mujeres. Tampoco pueden comunicar con ellas a través de cualquier medio escrito o telefónico, tampoco les pueden enviar mensajes.

Cabe recordar que estos dos policías serán los primeros en ser juzgados por un caso que deriva de la investigación sobre la trama policial.El fiscal les pide duras penas de prisión. Contra uno de ellos reclama diez años de prisión, cuatro años más que contra el segundo policía implicado. También un excomisario de la Policía Local de Palma será juzgado por no haber evitado, pese a conocerlo, que estos episodios de homofobia se produjeran.

Los dos funcionarios han abandonado esta tarde el centro penitenciario de Palma.