Luis Pineda, presidente de la asociación de consumidores Ausbanc, que está en prisión desde hace once meses acusado de extorsionar a las entidades bancarias, con la ayuda de la agrupación Manos Limpias, ha intervenido esta mañana como abogado en un juicio que se celebra en la Audiencia de Palma. Ejerce como abogado de la acusación particular contra el que fuera delegado de la asociación, Carlos Hernández, al que se imputa un delito de apropiación indebida. En concreto la asociación acusa a su exdelegado en Baleares de apropiarse de 9.000 euros que correspondían a las provisiones de fondos que entregaban los asociados para que les representaran en un pleito.
Hernández niega la apropiación indebida y asegura que el dinero qu se le reclama corresponde a clientes que le contrataban a título personal y no como delegado de Ausbanc. Explicó al tribunal el incidente que tuvo con Pineda, que le amenazó de muerte tras anunciarle que abandonaba la asociación. Por estas amenazas fue condenado.
Pineda afirma que su delegado creó una asociación paralela, que utilizaba para quedarse con el dinero de los clientes que acudían a Ausbanc en busca de ayuda. El que fuera tesorero de la asociación ha explicado que todos los asociados tenían la obligación de ingresar todo el dinero en Ausbanc y que después se realizaba el reparto económico acordado. Señaló que descubrieron el presunto desfalco en Baleares cuando varios asociados llamaron pidiendo información sobre sus demandas, cuya comisión de fondos ya habían adelantado, y descubrieron que no aparecía ningún expediente en la asociación.
Pineda, que está preso en una cárcel de Madrid, ha sido trasladado por la Guardia Civil a Mallorca para intervenir en este juicio. Pasará la noche en la cárcel y mañana será trasladado de nuevo a la Audiencia para continuar el juicio.
