El Govern aprobó ayer la adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) estatal para los dos primeros trimestres del año por casi 500 millones de euros, de los 1.100 millones endeudamiento bruto a largo plazo previsto para todo el año. La portavoz del Govern, Pilar Costa, precisó que de esos 500 millones, 405 se destinarán a pagar deuda, en buena parte con el propio Estado, lo que es una "contradicción", pero el Ejecutivo se ve forzado, según ha dicho, a acogerse a este mecanismo, que ofrece mejores intereses que los bancos.

"No nos queda más remedio", afirmó Costa quien recordó que la adhesión al FLA "supone más control del Estado sobre las arcas autonómicas y la gestión del Govern". Añadió que es "un círculo vicioso" que sólo acabará "con un mejor sistema de financiación o con la compensación de la deuda del Estado y su condonación".

Del resto de los 500 millones, 6,36 se destinarán a la devolución de las liquidaciones negativas del sistema de financiación de 2008 y 2009 y 88,26 millones, a financiar el objetivo de déficit de este año.