PP y PSIB unieron ayer sus votos en el pleno del Parlament en contra de la toma en consideración de la proposición de ley presentada por Més para reformar la Ley Electoral balear, con el objetivo principal de rebajar del 5 % al 3 % el porcentaje de votos mínimos necesarios para que un partido obtenga representación en el Parlament y los consells insulars. Més, cuya propuesta contó con el respaldo de Podemos y El Pi y la abstención de Ciudadanos, mostró su "gran decepción" con los socialistas, socios de legislatura, por su rechazo a una medida que aumentaría la posibilidad de los partidos minoritarios de llegar a las instituciones.

"Consideramos una gran decepción el voto en contra del PSIB, es decepcionante que ambos partidos (PP y PSIB) no quieran ni siquiera debatir", dijo Joana Aina Campomar, de Més per Mallorca. Nel Martí, portavoz de Més per Menorca, recordó que el PP aumentó en 1985 el techo electoral en Balears, que pasó del 3 al 5 por ciento, para impedir "sin contemplaciones" que UM obtuviera escaños, aunque no lo logró.

Además de bajar el techo electoral, la propuesta de Més también planteaba reducir a un único envío institucional los correos electorales que la Comunidad Autónoma distribuye durante las campañas para ahorrar dinero, cambiar el sistema de distribución de escaños regido por la Ley d'Hont por uno "más proporcional", y cambiar la distribución del tiempo gratuito de propaganda electoral en los medios de titularidad pública.

La diputada socialista María José Camps consideró que la iniciativa de Més chocaba con "límites constitucionales" y que la Carta Magna hace inviable la reforma que planteaba la propuesta ya que, si bien podría actuarse en lo que se refiere a la barrera electoral, no es posible en el resto de las cuestiones ya que "afectan a aspectos reservados al Estado". Añadió que la reforma que pretendía Més no es "competencia" del Parlament. "No hagan trampas y no jueguen al solitario", emplazó a los diputados de la formación econacionalista.

Miquel Jerez, del PP, afirmó que la propuesta de Més "nace con la mínima legitimidad para sacarla adelante" y resaltó que las iniciativas que buscan "cambiar las reglas del juego" deberían estar antes consensuadas entre los grupos parlamentarios.

Aitor Morrás, de Podemos, afirmó que hay partidos que quieren "mantener el 5% porque de lo contrario no podrían mantener la trama de empresarios y grandes fortunas", mientras que Josep Melià, de El Pi, consideró que "todo el mundo debería compartir" el objetivo de fomentar el pluralismo y reducir gastos electorales.