Los diputados de Podemos abandonaron ayer el pleno del Parlament balear durante la intervención de Álvaro Gijón (PP), al que llamaron "presunto mafioso" por su supuesta vinculación al caso Cursach. "Queremos que el Parlament deje de ser una cueva de ladrones", espetó la portavoz podemista Laura Camargo. Por su lado, la portavoz del grupo popular, Marga Prohens, censuró la actitud de los podemistas, tachándolos de "aprendices de fiscalillos frustrados"