Una espiral deliciosa como epicentro de la comunidad; una circunferencia con base de saïm como reina de la fiesta (una reina con paje: Tomeu Fontrroig, quien el otro día ganó la primera Menjaïmada -o concurso de comer ensaimadas- de la historia). Ayer, Dia de Balears, tocaba coronar a "la mejor ensaimada del mundo": la del Forn de Sant Francesc de Inca.

El jurado (con miembros de la Associació de Forners; periodistas y blogueros especializados; y caras conocidas de la 'tele, como Fabián, finalista de Masterchef) así lo consideró, tras catar y analizar con detenimiento las piezas de los diez finalistas.

El primer premio de este "campeonato mundial" -organizado por la empresa Hijos de Ramón Oliver para celebrar su centenario- es de mil kilos de harina. El segundo premio, que recayó en el Forn d'Es Casino de Banyalbufar, es de 500 kilos de harina. Y el tercer premio, de 250 kilos de harina, fue para la Panadería y Pastelería Coll de Sant Jordi, Palma.

Mientras en el Parc de la Mar los expertos degustaban en medio de una gran expectación, el Passeig Sagrera era una arteria de transeúntes que curioseaban por los los puestos, comían, compraban y bebían. Miles de ciudadanos pusieron las ganas y el sol pre-primaveral les dio el empujón final: el resultado fue una jornada abarrotada en el centro de Palma.

Además de pasear, los mallorquines y los turistas tenían una larga lista de exhibiciones y actividades a las que asistir, además de tener la opción de visitar lugares que habitualmente copan los turistas, como el Palau de l'Almudaina. Así, por ejemplo el Born acogió una 'ballada popular' multitudinaria además de una serie de interpretaciones de la Escola Superior d'Art Dramàtic de Balears (ESADIB) y en los jardines de S'Hort del Rei se llevó a cabo una actividad de supervivencia. De lo típico, ayer no faltó nada: ni el ball de bot,ni los dimonis (los de Kinfumfa), ni el tir de fona ni Tomeu Penya.