Siguiendo el camino ya marcado por el Llar d'Ancians de General Riera, la novena planta de la residencia de ancianos de La Bonanova será remodelada para acoger hasta 68 nuevas plazas para personas dependientes, según informó ayer Margalida Puigserver, consellera de Bienestar y Derechos Sociales y presidenta del Institut Mallorquí de Afers Socials (IMAS), que añadió que esta actuación se enmarca en la iniciativa de esta institución de reformar y modernizar sus residencias en esta legislatura.

El vicepresidente del IMAS, Javier de Juan, recordó que el Llar d'Ancians tiene cuarenta años de antigüedad y que la Bonanova se erigió hace treinta y cinco.

En breve se iniciará el proceso de licitación de la reforma que contará con un presupuesto de 2,4 millones de euros. Y, tal y como especificó De Juan, se prevé que la obra esté acabada a principios del verano del año que viene para que sus plazas puedan ser ocupadas por personas dependientes tras el estío de 2018.

En esta ocasión, recalcó el IMAS, se ha apostado por flexibilizar al máximo la distribución de la planta de manera que en ella se habilitarán 34 habitaciones que se podrán configurar en función de las necesidades de los usuarios. Así, informó el Institut Mallorquí de Afers Socials, la planta podrá tener desde 42 plazas distribuidas en 26 habitaciones individuales y 8 dobles, hasta 68 si las 34 habitaciones son dobles.

Tanto la presidenta Puigserver como el personal técnico que asistió a la presentación de la reforma incidieron en que se tratará de "una remodelación integral que responda a las necesidades de las personas más dependientes proporcionándoles espacios más accesibles".

La fisioterapia y la terapia ocupacional tendrán cabida en la nueva planta que, además, pretende humanizar más el nuevo espacio tanto para los usuarios como para sus visitantes.

De Juan subrayó la necesidad de las nuevas plazas ya que, admitió, solo en Mallorca hay más de un millar de personas en lista de espera para entrar en una residencia pública.

Concierto con SAR Quavitae

De otro lado, la consellera de Servicios Sociales y Cooperación, Fina Santiago, visitó ayer la residencia SAR Quavitae Palma, una de las residencias de Mallorca donde su departamento ha concertado 70 nuevas plazas para aumentar la oferta para personas dependientes. De las 70 nuevas plazas concertadas, 40 plazas se encuentran en la residencia SAR Quavitae Palma y las 30 restantes se distribuyen en las residencias SAR Quavitae de Capdepera (20 plazas), Costa d'en Blanes (cinco plazas) y Can Carbonell (cinco plazas).