Ocho carreteras de Mallorca mantienen aún cerrados al tráfico diversos tramos que suman casi 40 kilómetros por acumulación de agua y desprendimientos ocasionados por las intensas lluvias de los últimos días.

Según la última actualización de incidencias del servicio de Carreteras del Consell de Mallorca, de las 10.52 horas, la mayoría de los cortes se sitúan en el centro de la isla, que ayer llegó a tener 34 tramos viarios cerrados.

Las carreteras cortadas son la Ma-3412 en Santa Margalida; el Camí de s'Albufera Ma-3433 en Sa Pobla; la Ma-3441 de Llubí a Muro; la Ma-3100 de Algaida a Santa Eugènia; Ma-3201 de Montuïri a Pina, y la Ma-3200 de Montuïri a Pina.

Dos de las carreteras están cortadas por desprendimientos: se trata de la Ma-1150 en el Port de Sóller hacia el Far des Cap Gros, y la carretera del Coll de Sóller Ma-11A, cortada desde el viernes.

La carretera Ma-2100, entre Bunyola y Alaró, está abierta pero con restricciones, ya que se permite el tráfico de forma alternativa a los vehículos que circulan en uno u otro sentido.

La Dirección General de Emergencias ha hecho un llamamiento a la precaución, en el caso que se tenga que circular por tramos de la red viaria que se hayan visto afectados por las precipitaciones o por objetos en la vía, o que transcurran cerca de torrentes.

La lluvia, de menor intensidad que en las jornadas precedentes, afectará especialmente hoy a las Pitiusas y el norte de Mallorca, zonas que se mantienen en alerta amarilla por las precipitaciones.

La Agencia Estatal de Meteorología ha alertado por fenómenos costeros de riesgo medio (nivel amarillo) en todo el litoral balear, mientras que en Ibiza hay también avisto por vientos.