Balears es, con enorme diferencia respecto a cualquier otra comunidad autónoma, la zona de España en la que resulta más difícil adquirir una vivienda nueva, según se destaca en el último informe elaborado por la Sociedad de Tasación. En concreto, si un ciudadano medio de España necesita dedicar 7,4 años de su salario íntegro para poder convertirse en propietario de un inmueble de nueva construcción, en las islas, es necesario más del doble: 15,8 años de sueldo. Con una advertencia adicional que se lanza desde la patronal de promotores de Balears, desde la que se afirma que está situación va a ir a peor durante los próximos años debido a la escasez de producto existente y a que éste va dirigido principalmente a extranjeros y familias de elevado poder adquisitivo.

El estudio elaborado por ST, correspondiente a los seis últimos meses del pasado año, coloca a las islas entre las autonomías en las que más se ha encarecido la vivienda durante ese periodo, con un alza del 1,6%, solo superada por Cataluña con un 3,5%, y Madrid con un 2,8%.

Según este mismo estudio, Palma aparece entre las capitales de provincia con la vivienda más cara de España, a alcanzar una media de 1.875 euros por metro cuadrado construido. En Cataluña, el valor medio de sus capitales es de 3.164 euros por metro cuadrado (impulsadas por Barcelona), en el caso de Madrid se alcanzan los 2.966 euros, mientras que en las capitales vascas se llega a los 2.532 euros, con San Sebastián como máxima responsable de ese elevado importe.

Estos valores contrastan con los 1.135 euros por metro cuadrado de media en las capitales extremeñas o los 1.196 euros de Murcia.

Esfuerzo inmobiliario

Esta sociedad de tasación coloca a las islas como la comunidad autónoma en la que resulta más difícil acceder a una vivienda, teniendo en cuenta tanto el valor de sus inmuebles como sus salarios (hay que recordar que éstos aparecen claramente por debajo de la media española, según las encuestas publicadas por el INE).

Según Sociedad de Tasación, la situación balear no tiene parangón en España, y sitúa el esfuerzo necesario para conseguir la propiedad de una vivienda nueva en el archipiélago en 15,8 años del salario medio que se cobra, frente a los 7,4 años en que se sitúa la media española. El menor esfuerzo se asigna a los residentes de La Rioja, con 4,6 años.

De este modo, ST afirma que los sueldos medios de Balears prácticamente deberían de duplicarse para poder facilitar la compra de un inmueble nuevo.

En este estudio se aprecia también un ligero retroceso de la confianza de los empresarios de las islas respecto a la evolución que este mercado va a tener durante el primer trimestre de este año, frente al aumento medio que se percibe en el conjunto del país.

Evolución a peor

Según el presidente de la asociación empresarial de promotores de Balears, Luis Martín, las dificultades que los isleños padecen a la hora de poder acceder a una vivienda nueva se sustentan en el escaso producto que en estos momentos está saliendo al mercado, muy dirigido al cliente extranjero y de elevado poder adquisitivo, debido a su vez a que en las islas apenas se encuentra suelo que permita desarrollar promociones cuyo valor sea asequible para el bolsillo medio de los residentes. Y aquí reitera la advertencia de que esta situación va a seguir empeorando durante los próximos ejercicios.

Según el presidente de los promotores, el excesivo valor del suelo, sumado a la inseguridad jurídica que se está viviendo en el archipiélago a causa de la gestión urbanística que se está desarrollando, hacen que por el momento no se vislumbre ninguna mejoría en esta materia.

Así, en la actualidad se hace evidente, según apunta Luis Martín, que la demanda de vivienda es muy superior a la oferta de nuevas residencias que salen al mercado, lo que está impulsando con fuerza su valor hacia arriba.

Como único aspecto positivo, Martín señala que comienza a detectarse un mayor poder adquisitivo de las familias de las islas, lo que facilita su acceso a la financiación.