La isla recupera hoy lentamente la normalidad tras las inundaciones que afectaron a toda la zona del Migjorn y el Llevant. Los bomberos han terminado todos los trabajos derivados del temporal y en estos momentos solo tienen un servicio: un árbol desplomado en Sóller.

Todas las carreteras que fueron cerradas ayer por las inundaciones han sido reabiertas durante la noche salvo dos: la que une Campos con la Colònia de Sant Jordi y la que va de Montuïri a Pina.

Mientras tanto, los escolares de diecisiete municipios siguen disfrutando de su día de fiesta extra después de que el Govern suspendiera las clases ayer por precaución.