Las desavenencias entre los socios del Pacto de Izquierdas del Consell de Mallorca se han hecho patentes hoy con una importante fractura entre los socios. El departamento de Territorio y Carreteras, que dirige la socialista Mercedes Garrido, presentaba en comisión informativa el proyecto de construir un enlace desde la autopista de Inca que llegue a Lloseta. Los consellers de Podemos se negaron a votar a favor del proyecto al considerarlo impactante y se abstuvieron.

El PSOE y Més tuvieron que recurrir a la oposición para poder sacar adelante el proyecto reivindicado por los municipios del Raiguer ante el desmarque de su socio de gobierno podemita. Al final, el proyecto salió adelante gracias a los votos a favor de El Pi y Ciudadanos y la abstención del PP. Si la oposición hubiera votado en contra el enlace de Lloseta no se habría aprobado. Socialistas y Més no esconden su indignación, ya que el partido que gobierna con ellos los dejó en la estacada.

Este proyecto tiene un coste de 9,5 millones de euros y tiene como principal objetivo el de sacar tráfico de la ciudad de Inca, especialmente el que se dirige hacia Lloseta.