En el último Informe PISA los colegios concertados de Balears obtienen 20 puntos más que los públicos. Así lo recoge esta evaluación internacional, cuyo último informe se dio a conocer ayer.

Interrogado por las posibles causas de esa distancia, el director general de Planificación, Ordenación y Centros, Antoni Morante, señaló que el Informe lo achaca al hecho de que la red subvencionada tiene una proporción mucho menor de estudiantes con un nivel socioeconómico más bajo, como el que puede tener el alumnado inmigrante, que la pública. Según estima la conselleria de Educación, la pública acoge a ocho de cada diez estudiantes extranjeros.

Tanto Morante como el conseller March recordaron que han adoptado medidas para redistribuir a este alumnado de manera más equilibrada, como los pactos y compromisos de escolarización firmados entre todos los centros educativos de un mismo municipio, como se ha hecho en Sa Pobla o en Inca. "Y que tendremos que estudiar para Palma", admitió el conseller, quien recordó que el Informe PISA señala la inmigración como un factor que influye en los buenos resultados.

Esta evaluación internacional, que mide la comprensión lectora y la competencia matemática y científica de los chavales de 15 años, subraya en sus conclusiones que Balears es, junto a Madrid, Cataluña y La Rioja, una de las comunidades con mayor proporción de estudiantes extranjeros, y que estos obtienen un rendimiento académico más bajo que los nativos.

"Con cada alumno inmigrante que llega hay que hacer un proceso de adaptación", razonó March, que también señaló que el Informe apunta a las elevadas tasas de repetición que se dan en España como un punto débil del sistema.

A nivel nacional PISA considera "extraordinario" y "alarmante" que uno de cada tres estudiantes de 15 años repita curso (lo que está 20 puntos por encima de la media europea) y en Balears la tasa sube al 40%, el porcentaje más alto del país junto a Murcia, Extremadura, Canarias y Andalucía.

El coste económico de repetir

La Conselleria destacó sin embargo que los resultados de los repetidores de Balears en PISA son más altas que la media de la OCDE y de la UE. El informe subraya además que una gran parte de los alumnos repetidores de las islas han adquirido las competencias básicas en Ciencia y obtienen buenos resultados.

Martí March coincide con PISA en la necesidad de revisar las políticas de repetición, entre otras cosas, por un motivo también económico. El Informe alerta en sus conclusiones del "coste social y económico" que supone para España tener una tasa tan elevada de alumnos repetidores.