­La campaña de inspecciones contra el intrusismo desarrollada por la dirección general de Transportes del Govern durante este verano se ha saldado con 937 controles realizados en Mallorca y 37 expedientes abiertos, una cifra muy baja en opinión de algunas patronales del sector que consideran que se ha errado a la hora de fijar los objetivos de la vigilancia realizada. Por ello, y tras la reunión mantenida ayer por ambas partes, el conseller de Movilidad, Marc Pons, anunció que durante el próximo año esta campaña incluirá también un barrido por las páginas web que ofrecen productos vinculados a esta actividad.

Esta iniciativa, desarrollada entre los pasados meses de mayo y septiembre, ha conllevado la realización de 937 inspecciones en Mallorca y 550 en Eivissa, y de las primeras se han derivado 37 expedientes sancionadores mientras que en la pitiusa se han alcanzado los 73. El valor global de las sanciones propuestas alcanza los 305.000 euros.

Estos datos se facilitaron tras la reunión mantenida entre los responsables de la Conselleria y los representantes del sector, con la presencia de patronales como la federación balear de transportistas y la de autónomos del taxi. El encuentro se prolongó durante más tiempo del previsto y uno de los motivos fueron las discrepancias expuestas por algunos de los asistentes respecto a la forma en la que se ha desarrollado esta iniciativa.

El conseller indicó que en esta vigilancia han participado 12 inspectores y subinspectores de su departamento, que se han visto acompañados por Policía Local y Guardia Civil, con actuaciones en las que se ha dado prioridad a los municipios más turísticos.

El problema, según alguna organización empresarial, es que se ha primado en exceso la inspección de vehículos legales (taxis y autocares), en lugar de buscar a los denominados ´piratas´, es decir, aquellos que no respetan la normativa y que en muchos casos actúan con automóviles que no llevan ninguna identificación de servicio público. Uno de los presentes lamentó que "apenas se ha expedientado a los piratas porque casi no se les ha buscado".

El conseller rechazó esta crítica y aseguró que el 40% de los controles se han aplicado sobre transportistas convenientemente identificados, pero que en un 60% de los casos la vigilancia se ha puesto sobre automóviles sin identificar y de los que se sospechaba que podían estar realizando algún transporte ilegal.

Pese a ello, Marc Pons reconoció que las propuestas presentadas pueden servir para mejorarla campaña de vigilancia prevista ya para el próximo verano, y en este sentido destacó que una parte de los inspectores se destinará a realizar controles de páginas web en las que se ofertan este tipo de actividades, al considerar que en algunas de estas plataformas se pueden estar comercializando ofertas de transporte irregulares.

Cámaras operativas

Respecto a las cámaras de video para la identificación de matrículas que se han instalado en el aeropuerto de Palma para detectar a posibles intrusos, el conseller destacó que ya se encuentran totalmente operativas, por lo que serán una herramienta más para luchar contra el intrusismo durante la próxima temporada turística.

En cualquier caso, el conseller consideró que los resultados obtenidos confirman que Eivissa es la isla en la que la actividad irregular en materia de transportes está más acentuada, seguida de Mallorca.

Por otro lado, se felicitó de que la temporada turística haya sido buena para las empresas del sector, a la vista de los datos ofrecidos por las patronales.