Algunas cadenas hoteleras y algunos destinos de la isla están demostrando que el invierno es en muchos casos una actitud. En Paguera llevan tres años siendo los primeros que estrenan la temporada, tanto en los hoteles como en la oferta complementaria. ¿Cómo? Lo explica su presidente hotelero, Toni Mayol: invirtiendo en eventos ligados al deporte y abriendo hoteles y negocios auxiliares para darles servicio. Platja de Palma sigue la misma senda, aunque con estrategias combinadas. Mientras algunos establecimientos tipo Playa Golf o Garonda se dan al lujo, el golf y la cultura, otros como los de Iberostar resistirán todo el invierno abierto a base de usar eventos y congresos como fuente de ingresos fijos, sobre los que buscarán captar otro tipo de clientes. Para ello, complementan los eventos con oferta gastronómica de alto nivel. "Hemos apostado por restaurantes que atraen no solo a los clientes del hotel sino también a los de fuera. El invierno es época para hacer eventos como jornadas gastronómicas. El mercado local responde muy bien", explica Xisco Martínez, de Iberostar, que apuesta por su cuatro estrellas superior y su cinco estrellas para Platja de Palma. "Las escapadas de invierno se dan más en hoteles de esas categorías", apunta, deseoso además de que la actividad del Palacio de Congresos ayude a todo el sector a captar eventos de invierno.
