La ejecutiva del PSIB-PSOE, presidida por Francina Armengol, acordó ayer permitir que sus dos diputados en el Congreso, Pere Joan Pons y Sofía Herranz, puedan votar no en la investidura de Mariano Rajoy. Antes de optar por la desobediencia a la gestora socialista, intentarán la vía del diálogo. La propia Armengol ha solicitado una reunión urgente con el presidente del órgano que manda ahora el PSOE, Javier FernándezJavier Fernández, para que permitan la libertad de voto de los diputados y evitar así una ruptura. No obstante, Francesc Miralles, portavoz del PSIB, aseveró que en el caso de que la gestora imponga la disciplina de partido "se permitirá a los diputados del PSIB a que "voten a conciencia".
Miralles reconoció que hay poco tiempo para mantener el encuentro entre Armengol y Fernández. Entre otras cosas porque lo más probable es que el próximo jueves o viernes se convoque el pleno de la investidura y, por consiguiente, solo queda hoy y mañana para que Armengol consiga volver a exponer su postura ante el presidente de la gestora.
El PSIB quiere agotar la vía del diálogo. Consideran que con la libertad de voto se evitará "agudizar" aún más la división en que está sumido el partido. "No hemos decidido -apuntó Francesc Miralles- romper la disciplina de voto porque tenemos la esperanza de que la dirección del partido vea la necesidad de cerrar filas en favor de unir el partido". El portavoz del PSIB pidió que se administrara con inteligencia la falta de unanimidad que se dio en el comité federal del domingo y "permitan que las diferentes sensibilidades existentes en el PSOE se manifiesten en la votación de investidura de Mariano Rajoy".
Uno de los aspectos que reafirmó el posicionamiento contrario a la abstención de los socialistas isleños fue "el compromiso claro con nuestros votantes". En este sentido, Francesc Miralles añadió: "Nosotros nos presentamos a dos elecciones con un mensaje claro en Balears. Éste no era otro que el de acabar con las políticas del PP. Ahora no nos pueden pedir que cambiemos de postura de forma imperativa". A renglón seguido repitió lo que desde el mes de diciembre de 2015 vienen diciendo desde el PSIB y en especial Francina Armengol. "Desde el principio -apuntó- hemos dicho que nuestra opción era un pacto de izquierdas como el de Balears, no ha podido ser, pero tampoco queremos propiciar un Gobierno del Partido Popular".
"Que la gestora no se duerma"
En el seno del PSIB, pese a la esperanza verbalizada por Miralles en la reunión entre Fernández y Armengol, saben que es casi imposible que la gestora socialista que derrotó a Pedro Sánchez pueda permitir la libertad de voto. Cuando se le planteó a Miralles sobre la premura de tiempo para el encuentro entre la presidenta del Govern y Fernández, le salió una expresión muy mallorquina que demuestra a las claras la tensa situación: "Idò que no badin (Pues que no se duerman)". Esta repuesta deja entrever que el PSIB no esperará ni contemporizará con el PSOE nacional.
De hecho, el propio Miralles admitió que la postura de los dos diputados, en caso de que voten a conciencia, será claramente un "no a la investidura de Rajoy".
La ejecutiva socialista isleña valoró de forma muy negativa la decisión del Comité Federal: "Es un grave error histórico de consecuencias graves para el partido y que traiciona la palabra dada por el PSOE en las campañas electorales". Asimismo, llegaron a la conclusión de que la abstención en favor del PP "vulnera los137 años de historia" del partido socialista. "El PSOE no nació para permitir un Gobierno del PP, sino para ser su alternativa", Aseveró Francesc Miralles. "No podemos permitir regalar los votos al PP y entregar la oposición a Podemos", añadió.
El portavoz de los socialistas isleño también admitió que, en caso de que la gestora no permita la libertad de voto, no tendrán tiempo de convocar los órganos del partido. Será en este momento cuando desde el PSIB darán manos libres a los dos parlamentarios por las islas, Pere Joan Pons y Sofía Herranz, para que su voto en el Congreso de los Diputados durante la investidura de Rajoy sea "a conciencia".
La amenaza de Podemos
Francesc Miralles y la propia Francina Armengol quisieron separar en todo momento la elección de un Gobierno en Madrid con la situación del Pacto de Govern con Podemos y Més. Sin embargo, las palabras de la portavoz de Podemos, Laura Camargo, diciendo que el Pacto "quedaría tocado si los dos diputados de Balears se abstienen en favor de Rajoy", fueron tenidas muy en cuenta durante la reunión de la ejecutiva socialista.
Miralles apuntó que "no nos sentimos amenazados por Podemos, ya que la decisión de ser coherentes y rechazar la abstención en favor del PP es una postura que defendemos por dignidad".
Por otra parte, Francina Armengol firmó ayer una carta, junto a 8 secretarios generales de federaciones socialistas más, donde solicitan a Javier Fernández que para cumplir el mandato del comité federal del domingo solo se abstengan los 11 diputados que faltan y no impongan unanimidad en el voto del resto de parlamentarios. Añaden que es la mejor fórmula para evitar agrandar la brecha que existe en estos momentos en el PSOE.
