Balears solo cubre el 2,24% de la demanda de producción de energía eléctrica procedente de fuentes renovables, según datos de Red Eléctrica Española. Eso deja a las islas, nuevamente, a la cola de España, y muy lejos de las comunidades más sostenibles en lo energético: la cobertura de la demanda eléctrica de Castilla y León con renovables se situó en el 146,36% y la de Extremadura en 104,26 %. En ambas comunidades generan más energía renovable de la que necesitan para abastecerse (su aporte nutre al conjunto del sistema). Tras las dos citadas, aparece Castilla-La Mancha, con el 92,55%. En la cola, junto a Balears y sus 2,24% de cobertura limpia, aparecen Madrid (1,33 %) y País Vasco (4,68 %).

Castilla y León y Extremadura fueron así las únicas comunidades autónomas cuya producción de energía eléctrica procedente de fuente renovable superó su demanda durante 2015. Durante 2015, Castilla y León produjo 20.128 gigavatios/hora (gwh) de energía eléctrica con origen renovable frente a una demanda eléctrica de 13.752 gwh, mientras que Extremadura generó 5.014 gwh y demandó 4.809 y Castilla-La Mancha aportó 10.715 gwh y necesitó 11.567.

Aislamiento energético

El aislamiento geográfico derivado de la insularidad influye. Tanto que el balance también recoge que las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla y las comunidades de Balears y Canarias son la que tienen un porcentaje superior al 90% en cuanto al origen no renovable de su producción de energía eléctrica.

En el caso de Castilla y León, la mayor parte de la energía eléctrica renovable procede de la eólica, con una producción de 11.080 gwh, y la hidráulica (7.952 gwh), mientras que en Extremadura se alimente sobre todo de energía solar termoelétrica (2.038 gwh), hidráulica (1.612) y fotovoltaica (1.111 gwh).

En el conjunto de España, la demanda de energía eléctrica ascendió en 2015 a 262.931 gigavatios/hora (gwh), de los que 96.883 gwh fueron cubiertos con fuentes renovables, lo que supone el 36,85 por ciento. La producción neta de energía eléctrica en 2015 fue de 267.584 gigavatios/hora, con Cataluña (16%), Andalucía (13,3%), Castilla y León (11,67%), Galicia (11%), Castilla-la Mancha (8%) y Extremadura (7,89%), como principales aportadoras.

Más energía sucia que limpia

Respecto al origen de la energía eléctrica generada el pasado año, el 63,79% procedió de fuentes no renovables (nuclear, cogeneración, carbón, fuel/gas, ciclo combinado y residuos) y el 36,21% de renovables (solar, termoeléctrica, fotovoltaica, hidráulica, biomasa eléctrica, biogás, hidráulica marina, geotérmica, eólica e hidroeléctrica).

Las comunidades que más energía eléctrica demandaron fueron Cataluña, con el 17,7% del total, Andalucía (14,7%), Madrid (10,9) y Comunidad Valenciana (10,1%).