El Consell de Govern ha aprobado hoy el decreto por el cual se establece la reserva marina del Freu de sa Dragonera y se regulan las actividades subacuáticas y de extracción de flora y fauna marinas.

Tras la reunión del Consell de Govern, el conseller de Medio Ambiente, Agricultura, Vicenç Vidal, ha explicado que esta zona cuenta con 912 hectáreas y unos valores ecológicos y pesqueros "considerables", tal como pone de manifiesto el estudio elaborado en 2004 por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Actualmente, las Islas Baleares disponen de siete reservas marinas que ocupan una superficie total de 58.900 hectáreas.

Vidal ha comentado que son un "elemento básico" para la gestión pesquera, ya que se limita la explotación de los recursos marinos vivos para incrementar la repoblación de alevines y fomentar la proliferación de las especies marinas objeto de explotación o proteger los ecosistemas con características diferenciadas.

También ha manifestado que en los paisajes submarinos de sa Dragonera destacan las praderas de posidonia oceanica, muy extendidas hacia el sur, que actúan como zonas de elevada producción biológica y de alevinaje de especies de interés pesquero.

"Esto hace que el área merezca un alto grado de protección", ha dicho. Asimismo, la zona incluye parte del Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) de sa Dragonera y forma parte del entorno marino del Parque Natural.

En esta zona tienen lugar actividades que tienen una relación directa con los recursos pesqueros: lo explotan de manera tradicional las embarcaciones profesionales de artes menores de Andratx y las embarcaciones recreativas de Sant Elm y el puerto de Andratx, y también se lleva a cabo buceo recreativo.

Entre otras medidas, el decreto prohíbe en la zona los sistemas de pesca más agresivos como, por ejemplo, la pesca submarina, la de arrastre o la de rodeo, y tan sólo son autorizables las modalidades tradicionales de pesca profesional de artes menores y de pesca recreativa de superficie.

De las modalidades de pesca permitidas y de las actividades subacuáticas, más adelante la conselleria establecerá y delimitará las zonas y los usos (vedas, aparejos) permitidos, de acuerdo con los resultados de seguimiento y los acuerdos que tome la Comisión de Seguimiento de esta Reserva, creada por el artículo 8 del mismo decreto.

Se cumplen así las peticiones de varios colectivos sociales e instituciones públicas, como el Ayuntamiento de Andratx y el Parlament balear, que han pedido la declaración de una reserva marina en la isla, y se actúa así de acuerdo con la consideración de punto para la esperanza del mar Balear, declarado por el proyecto Mission Blue.

El objetivo de la iniciativa es generar el apoyo de la sociedad para la protección de estos lugares mediante la creación de una red mundial de áreas marinas protegidas que salvaguarden el 20 % de los océanos para el año 2020. El Mar Balear es el único punto con esta consideración en el Mediterráneo.

El decreto contiene, además, una disposición adicional para ampliar la protección máxima de la Reserva Marina dels Freus d'Eivissa y Formentera hasta la superficie inicial.

El 22 de mayo de 2015 se modificaron los límites de la zona de protección máxima de s'Espardell, reduciendo de manera relevante el área de la reserva integral, sin que hubiera ninguna justificación técnica o científica.

Por eso, ha subrayado el conseller, conviene ampliar de nuevo el área de protección máxima hasta las dimensiones originales, para no dejar desprotegidas las comunidades de peces que se han desarrollado a raíz de la protección que se decretó en 1999.

Con la aprobación del decreto se recupera la protección máxima de cien hectáreas que forman parte de las 15.000 que ocupa la Reserva Marina dels Freus d'Eivissa y Formentera, que habían perdido el estatus de reserva integral.