Día de resaca del aguacero de ayer en Mallorca. Las fuertes lluvias del sábado tuvieron todavía consecuencias durante la jornada de ayer: una playa cerrada, un socavón en la calzada y trabajos de achique marcaron el día.

Tras las intensas precipitaciones del sábado por la tarde, que llegaron a registrar hasta 40 litros por metro cuadrado en algunos puntos de la isla, según informó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la playa de Cala Major de Palma amaneció con problemas por vertidos de aguas fecales procedentes de un torrente cercano. Como consecuencia, la playa tuvo que ser cerrada al baño durante toda la jornada, provocando las quejas de algunos usuarios ante la presencia de la bandera roja. Según informaron los socorristas a los bañistas, está previsto que hoy vuelva a estar abierta al público.

Por otra parte, la Policía Local también tuvo que intervenir en la calle Llucmajor de Palma, a la altura de Ciutat Jardí, por un socavón. A causa de la filtración de agua, la calzada sufrió un hundimiento que obligó a los agentes a cortar la circulación en ese tramo y desviar los coches mientras se realizaban los trabajos de reparación durante la mañana. Desde las 14.00 horas, la calzada volvió a estar abierta al tráfico.

A lo largo de todo el día los bomberos y los efectivos de Protección Civil estuvieron trabajando en los desperfectos ocasionados por el agua y la tormenta. Entre las tareas de las que informaron, Protección Civil retiró un árbol caído por la noche que obstaculizaba un camino en el municipio de Montuïri, mientras, por su parte, los Bombers de Mallorca intervinieron en vías inundadas en los alrededores de Santa Ponça. Durante el sábado, las lluvias ya obligaron a cerrar varias calles que se vieron anegadas en la zona costera del municipio de Calvià.

Para este lunes, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantiene la alerta amarilla en todo el archipiélago, así como el riesgo de lluvias y tormentas localmente fuertes, especialmente durante el día a partir de las 12.00 horas y hasta las 18.00, cuando se concentran las mayores probabilidades de precipitación.

A partir de mañana martes desaparece el riesgo de tormenta, aunque a lo largo de toda la semana seguirán los cielos parcialmente nublados y se mantienen las probabilidades de precipitación en las cuatro islas. Sólo a partir del sábado podrían remitir las nubes en el archipiélago.